90 AÑOS DE APRISMO
Escribe: Eudoro Terrones Negrete
Está en circulación nacional la obra 90 años de aprismo, su autor es el ex presidente de la República, Alan García Pérez. Se publica un año antes de cumplirse 90 años de la fundación en México de la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA), primero como ideología y después como partido político, y que se conmemorará el 24 de mayo de 2014.
Alan García hace un balance de la vitalidad histórica de este gran movimiento político peruano y latinoamericano. Sostiene que su vigencia, en la era de la globalización, responde al acierto de su filosofía, ideología y doctrina, a la vida ejemplar y honesta de Haya de la Torre al servicio de la causa del pueblo.
En sus 172 páginas, el autor analiza y explica, dentro del aparato administrativo, el burocratismo, el proteccionismo, el estatismo controlista, el asistencialismo y el colectivismo; enfatiza las bondades y ventajas de conformar el Frente Único de Trabajadores Manuales e Intelectuales, la Democracia social, el Estado Antimperialista y la integración continental. Y tras desenmascarar a los adversarios del aprismo en la historia e identificar los errores de su partido, puntualiza el temor al Apra motivado por su ideologismo, tendencia al sectarismo, impaciencia e ineficiencia, entre otros.
García Pérez asevera que el sistema económico mundial continúa creciendo en conjunto y tiene una mayor liquidez. Por tanto, aconseja que el Perú deberá utilizar esta liquidez para incorporar la moderna tecnología, aumentar la potencia nacional de la producción, distribuir las exportaciones y la riqueza de manera equilibrada y justa, competir con inteligencia, incrementar el empleo, lograr el crecimiento sostenido, la autonomía, la libertad y la justicia de la patria.
El ex mandatario considera que la economía social progresista requiere de un sistema político austero, eficiente, ajeno a la corrupción y socialmente representativo, teniendo como instrumento y guía útil el pensamiento revolucionario de Haya. Pero también los apristas necesitan comprender que hoy existen nuevos grupos y formas de acción, que el pensamiento aprista ya es patrimonio del Perú -y no solo del partido-, por lo que deberán mantener la apertura y convocatoria a todos los trabajadores del país, vincularse al pueblo, interpretar el pensar de la inmensa mayoría y plasmarlo en la realidad del país. Para vincularse al pueblo el Apra debe ser el partido de las micro y pequeñas empresas urbanas y rurales, por ser éstas expresiones creadoras y productivas que contribuyen al engrandecimiento del país.
El autor cierra la obra formulando una propuesta por el futuro del aprismo, dentro de una democracia integral y funcional (social, económica, cultural y política) capaz de garantizar mayores niveles de justicia, de libertad individual y colectiva.
La historia dio razón al aprismo. García Pérez dejó bien parado al Perú en su segundo gobierno (2006-2011), con una economía en crecimiento, sólida, confiable y respetable en el mundo. “Hoy el régimen de Ollanta Humala, más allá de sus ofertas electorales, ha mantenido la continuidad del sistema democrático y el mismo modelo económico que dejamos” remarca Alan García Pérez.