¿POR QUÉ EL COMUNISMO NO FUNCIONA?
Escribe:
Dr. Eudoro Terrones Negrete
El comunismo como sistema y doctrina social, económica
y política nació en el siglo XIX en plena Revolución Industrial capitalista.
El comunismo se
desarrolla en dos etapas: en la primera etapa inferior se denomina socialismo y en la segunda etapa
superior comunismo propiamente dicho.
Ninguno de los países del mundo puede llegar al comunismo pleno sin pasar por
la primera fase.
La filosofía, ideología y
doctrina del comunismo fue desarrollado por Karl Marx, en “El Capital”, Marx
y Engels en “El Manifiesto Comunista” (1848), Vladimir Lenin en “El Estado y la Revolución”, “La economía
y la política en la época de la dictadura del proletariado” y “El materialismo y empiriocriticismo”, José Stalin en “Obras Completas de Stalin”, León
Trotsky en “Pensamiento vivo de Marx”, “Terrorismo y comunismo”, “La revolución traicionada”, “Historia de la
revolución Rusa”, Mao Tse-tung en sus “Obras escogidas de Mao Tse-tung”, entre
otros autores.
En el comunismo hay un solo partido político en el que gobierna una élite privilegiada, el politburó. El comunismo está
representado por una organización internacional que lleva el nombre de Internacional
Comunista. Teóricamente divide la sociedad en dos
clases: la burguesía y el proletariado[1]
y ambos enemigos que se enfrentan directamente.
Cabe remarcar que en el campo práctico el comunismo feneció tras el
derribo del Muro de Berlín, realizado el 9 de noviembre de 1989 por la
población alemana, de manera pacífica, sin derramar una sola gota de sangre y
sin disparar una sola arma de fuego. Los acontecimientos generaron la
disolución de la Unión Soviética y la caída del bloque comunista en Europa en
1991.
El Muro de Berlín dividió
la capital de Alemania en dos partes durante 28 años en el siglo XX. El muro de la Guerra Fría había sido construido el 13 de agosto de 1961 para que los
alemanes del este no se escaparan
hacia el oeste. Este muro era denominado en la República Democrática
Alemana (RDA) «Muro de Protección
Antifascista» y por parte de los medios de comunicación y de la opinión
pública de la República Federal Alemana (RFA) como
«Muro de la Vergüenza». El muro tenía una pared de hormigón entre 3,5 y 4 metros de altura, 45 kilómetros dividió la
ciudad de Berlín en
dos, mientras que otros 115 kilómetros rodeaban su parte oeste aislándola de la
RDA.
Pues bien. Ahora tratando de responder a la pregunta que motiva el
presente artículo ¿Por qué el comunismo no funciona?, expondremos algunas
razones al respecto.
Para unos, el comunismo no
funciona porque los países de capitalismo privado lo bloquean
económicamente y lo marginan del comercio mundial para que sus poblaciones
sufran las nefastas consecuencias de la crisis permanente ante la escasez de recursos
económico-financieros.
Para otros, el comunismo no funciona porque en su gobierno se nombran a
leales de su ideología en puestos claves de la economía y del Estado, que en la
práctica son los menos capacitados para dirigir la economía de un país,
deviniendo en incompetente el partido-Estado.
El comunismo no funciona por su autoritarismo dictatorial, por las fallas
estructurales en su organización verticalista, represiva y manipuladora de las
conciencias colectivas; no funciona por quitar riqueza, bienes y propiedades a
los que tienen y sólo repartir pobreza y
miseria; por mantener una oligarquía
gubernamental privilegiada con niveles de vida muy superiores al del ciudadano
promedio.
El comunismo no funciona porque sólo cree en
la masa “el pueblo”, y no en el individuo; porque anula la individualidad (no
hay libre albedrío de la persona) y cercena las libertades (libertad de opinión, expresión y difusión, libertad de afiliación
a partidos políticos de oposición, libertad de empresa y libertad de creencia).
El comunismo no funciona porque es una ideología utópica, materialista y atea que
conduce a un mañana indescifrable; es un ideal mental que puesto en política o
economía no calza nunca en la realidad de los pueblos. Además niega la esencia
del ser humano; aplica los libros a las realidades y no las realidades a los
libros como debería ser; anula la motivación para la autosuperación de las
personas.
El comunismo
no funciona porque es la teoría
política de la improvisación, el fracaso y la desesperanza; porque es la
repartición de la pobreza y el credo de los perezosos mentales. No funciona porque
centraliza en pocas personas las decisiones gubernamentales, no deja operar a los mercados y ejerce excesivo
control desde el partido-Estado.
El comunismo no funciona porque es
un sistema opresor y explotador de los pueblos y que acumula masas populares sufriendo
hambre, miseria y pobreza; porque viola los derechos fundamentales de las
personas y pueblos a vivir en paz, a la vez que vulnera y manipula su educación,
cultura e historia.
El comunismo no funciona porque en
diferentes etapas de la historia mundial se han registrado y se registran miles
de persecuciones, encarcelamientos, deportaciones, represiones, incendios de
edificios y de templos, con cientos de muertes y heridos.
El comunismo
no funciona porque el
régimen oligárquico rehúsa a devolver el poder al pueblo en elecciones libres y
sin manipulación ni fraude. No funciona porque bajo la estrategia de cambiar a
su medida la Constitución política de los países se queda indefinidamente en el
poder bajo el amparo de la dictadura del proletariado.
Actualmente en ninguno país comunista
o socialista del mundo se ha logrado aplicar de manera pura y completa la ideología de Marx (alemán), Engels (alemán), Lenin (ruso), Stalin (ruso), León
Trotsky (ruso), Mao Zedong (chino) y Fidel
Castro (Cuba), debido a la corrupción de su oligarquía gobernante, a sus
intereses, conflictos, contradicciones, disputas internas y divisiones por la
captura del poder y el abuso descontrolado del poder político.
El comunismo no funciona porque no ha abolido las contradicciones de clase,
persiste las diferencias de clase entre la clase obrera y
el campesinado, persiste las diferencias culturales y de vida entre la ciudad y
el campo, persiste las diferencias entre los que más tienen y los que menos
tienen. No hay un solo país comunista en el mundo en el que haya desaparecido la moneda, las clases sociales, el
Estado y menos las contradicciones entre el trabajo físico y el trabajo intelectual.
Los líderes en sus arengas públicas dicen ser
“socialistas”, “humanistas”, “humildes”, “democráticos populares” y que “buscan
un gobierno del pueblo”, pero nunca dicen que son realmente comunistas para no
generar reacción en el pueblo que pretende conquistar. Al respecto, en 1959, Fidel Castro ante una pregunta de la prensa
dijo…..”Yo no soy comunista, nuestra revolución es verde como las palmas de
Cuba, soy humanista, pero tampoco lo vamos a negar para complacer al
imperialismo”.
El comunismo no funciona
porque considera que “La violencia es la
partera de la historia” y se oliva más bien que es la “sepulturera de la
historia”, que “El ser social determina la conciencia” y que la “conciencia del
pueblo” es el único intérprete válido
de las necesidades colectivas y el único administrador, fiscalizador y
distribuidor de sus bienes y la riqueza de la nación.
Carlos
Marx y Federico Engels, en “El
Manifiesto Comunista” de 1848 subrayaron: “Los comunistas…, proclaman
abiertamente que sus objetivos tan solo se pueden alcanzar mediante el
derrocamiento violento de todo el orden social preexistente”.
El comunismo no funciona porque rechaza la diversidad ideológica;
practica el unipartidismo, promueve la ilegalización de los partidos opositores,
propicia la persecución, el linchamiento y la desmoralización de las personas
que tienen pensamientos diferentes y discrepantes con la filosofía, ideología y
doctrina comunista.
El comunismo no funciona
porque incentiva y refuerza la lucha de clases, prohíbe el
funcionamiento de instituciones religiosas, censura a la prensa democrática, controla a los medios de comunicación y
aplica progresivamente fuertes impuestos a las personas y empresas que
concentran recursos económico-financieros.
El comunismo no funciona porque no
es democrático, se gobierna por una dictadura que utiliza la democracia para
implementar sus fines repudiables. Al respecto, Bertrand Russell, filósofo
inglés y uno de los pilares del mundo libre y progresista, en su obra
“Diccionario del Hombre Contemporáneo”, señala: “El comunismo no es
democrático. Lo que se llama “dictadura del proletariado” es, en realidad, la
dictadura de una minoría convertida en una oligarquía
gobernante. La historia demuestra que el gobierno siempre sirve los
intereses de la clase que gobierna, excepto en las cosas en que está influido
por el miedo de perder su poder. Esto es lo que enseña, no solamente la
historia, sino Marx…La unificación completa de los poderes económico y
político, produce una terrible máquina de opresión, en la cual no hay troneras
para las excepciones. Bajo tal sistema, el progreso se haría pronto imposible,
ya que los burócratas son enemigos de todo cambio, como no sea un aumento de su
poder.”
Según afirma
el ensayista y escritor francés, Thierry Wolton, el
comunismo no funciona
porque los
partidos-Estado comunistas han tratado de “imponer su política a través de lo
que yo llamaría una guerra civil permanente contra el pueblo.”
El comunismo no funciona porque siempre alientan
idealistamente una “sociedad nueva” y un “hombre nuevo” bajo el pensamiento único
y lo que consiguen es acentuar más la
opresión y explotación del hombre por el partido-Estado, sin lograr que el
hombre pueda vivir con satisfacción plena de sus necesidades materiales,
biológicas, espirituales, sociales, económicas, culturales, religiosas y
morales. La oferta del “paraíso rojo terrenal” quedó frustrado a la mitad del
camino, ante el insospechado y veloz avance de la ciencia y la tecnología del
siglo XXI.
El comunismo no funciona
por el aburguesamiento de la clase obrera y de los
intelectuales; por la práctica totalitaria de la policía política (la Armada
Roja); y por intentar monopolizar universalmente las ilusiones y esperanzas
humanas.
El
comunismo no funciona porque quienes dirigen el partido, toman y asumen el
poder son intelectuales pequeñoburgueses. La corrupción, que teóricamente dicen
combatir, en la práctica se afianza, profundiza, extiende y agrava sin llegar a
rigurosas e imparciales investigaciones y sanciones.
El comunismo no funciona porque despoja,
desespiritualiza, desdiviniza, atemoriza y espanta a las personas que profesan
una determinada creencia religiosa; porque
persiste en disolver la familia y las instituciones religiosas, en
implementar la revolución vertical a través de un puñado de “iluminados” y
“privilegiados” y que amalgamados en el partido único tienen sus propios
intereses, que no son necesariamente los intereses de la mayoría.
El comunismo no funciona porque en la práctica es imposible y difícil de
igualar a todos en la riqueza, atender a todos en sus reales y variadas
necesidades. Los bienes no son de
propiedad común, sino que todos los bienes pertenecen al Estado.
En fin, el comunismo sigue haciendo agua por todos lados y su proceso
evolutivo entra en cuidados intensivos en el siglo XXI y con pronóstico
reservado. El comunismo, esencialmente deviene en imposible de ser realizado,
generando, por consiguiente, frustración de sueños y de esperanzas, rabia
contenida o enorme indignación.
[1]
Burguesía es la clase de los
capitalistas modernos, que son propietarios de los medios de producción social
y emplean trabajo asalariado. Proletarios es la clase de los trabajadores asalariados modernos,
que, privados de medios de producción propios, venden su fuerza de trabajo para
poder existir.