Artículos periodísticos y de investigación

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27 de abril de 2021

La anemia durante la primera infancia en el Perú

 

LA ANEMIA DURANTE LA PRIMERA INFANCIA 

EN EL PERÚ




Escribe: Dr. Eudoro Terrones Negrete

 

El presente artículo tiene por objetivo describir el problema de la anemia, definir términos, identificar sus síntomas, causas y consecuencias, efectuar el tratamiento y proponer algunas acciones básicas de política para prevenir y combatir la anemia en la primera infancia en el Perú.

 

DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA

La Primera Infancia o Infancia temprana, es la etapa evolutiva del ser humano comprendida entre los 0 y los 6 años; es la etapa fundamental para el desarrollo cerebral, intelectual, motor, emocional, afectivo, psicológico y social de los niños y las niñas y por lo tanto requiere de mucha atención por parte de los padres de familia y del Estado para generar su óptimo crecimiento y desarrollo integral.

En cambio, la segunda infancia o niñez es la etapa evolutiva que va desde los 6 hasta los 12 años de edad, etapa que precede a la adolescencia.

Indiscutiblemente la primera infancia es una etapa crucial en el desarrollo vital del ser humano. En esta etapa se asienta todos los cimientos para los aprendizajes posteriores, dado que el crecimiento y desarrollo cerebral, resultantes de la sinergia entre un código genético y las experiencias de interacción con el ambiente, van a permitir un incomparable aprendizaje y el desarrollo de habilidades sociales, emocionales, cognitivas, sensoperceptivas y motoras, que serán la base de toda una vida.[1]

La Primera Infancia es la etapa más importante en la vida de una persona, ya que los primeros cinco años marcan en gran manera cómo podría desarrollar su vida en aspectos como la salud mental, condición física y hasta sus oportunidades laborales; sin embargo, esta etapa puede verse afectada por enfermedades como la anemia, problema nutricional de mayor magnitud en el mundo y que, a pesar que se conocen numerosos estudios sobre su etiología y la forma cómo se debe enfrentar, sigue siendo uno de los problemas nutricionales menos controlados[2].

La anemia en términos generales representa el más extendido problema de salud y nutrición pública y que reduce las posibilidades de desarrollo sostenible en los países del mundo.

Se estima que más de 2, 000 millones de personas (30 % de la población mundial) registra algún grado de anemia. Si bien es verdad los niveles de anemia son mayores en los países, regiones y grupos poblacionales con mayor nivel de pobreza, afecta a casi todos los países y todos los grupos poblacionales, incluidos los no pobres. La principal causa de anemia es el déficit en el consumo de hierro, elemento principal para la formación de hemoglobina, lo que puede ser exacerbado por las enfermedades infecciosas.[3]

Bajo el acuerdo colectivo mundial llamado “El Marco de Acción y Declaración de Dakar” (2000) sobre Educación para Todos”[4] , se establecieron 6 objetivos fundamentales. El primero establece “extender y mejorar la protección y educación integrales de la primera infancia, especialmente para los niños más vulnerables y desfavorecidos”, por lo que surgió la necesidad de construir políticas que permitieran que todos los niños y niñas accedan a programas de atención y educación de calidad, en un marco de igualdad de oportunidades y de desarrollo humano. Este objetivo, a su vez, se encuentra en el marco de los derechos de los niños, establecidos en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Niños.

Ante la persistente problemática de la anemia la Organización Mundial de la Salud (OMS)  recomienda que la reducción de la anemia sea considerada como una prioridad en las políticas públicas y sanitarias en los países del mundo, particularmente en los países que registran alta prevalencia de anemia en los grupos poblacionales vulnerables (mujeres gestantes y niños menores de tres años de edad).

La prevalencia de la anemia como un problema de salud pública está caracterizada por la OMS según se indica: ”5%, no representa un problema de salud pública; 5 a 19.9%, problemas de salud pública leve; 20 a 39%, problema de salud pública moderado; 40%, problema de salud pública grave”.

Consiguientemente habiéndose registrado anualmente en el Perú más de 40 % de anemia infantil, constituye uno de los problemas de salud pública grave, que afecta primordialmente a los sectores de bajo nivel socioeconómico, es decir, de los que menos tienen. Por lo tanto, estudiar, investigar, prevenir, combatir y erradicar el problema de la anemia en la primera infancia es de vital importancia para el campo clínico, social, pedagógico, la tranquilidad de los hogares y el futuro de la sociedad peruana.

Prevenir y combatir la anemia infantil demanda al Estado peruano recursos económicos muy altos. Se estima que cuantificado en soles le cuesta al Estado cada año más de 3,000 millones, suma que es consignado en el presupuesto de la República.

Según la Ley N° 26842, Ley General de Salud, la salud es condición indispensable del desarrollo humano y medio fundamental para lograr el bienestar individual y colectivo; la protección de la salud es de interés público, por tanto es responsabilidad del Estado regularla, vigilarla y promoverla.

No obstante los esfuerzos realizados, es lamentable que hasta la fecha los distintos gobiernos de Perú no hayan podido disminuir la anemia infantil sustantivamente, menos aún erradicarla, no obstante contar con los necesarios recursos económicos. La anemia en lugar de bajar aumenta exponencialmente, y debido a la inadecuada implementación e ineficacia en la estrategia de la política pública del sector salud, del Programa Articulado Nacional (PAN) y del Plan Nacional para la Reducción de la Anemia. Situación problemática que por sus consecuencias en la vida de los niños y las niñas viene despertando serias preocupaciones en los ámbitos y niveles de salud y de la población en general.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la anemia como la presencia de una concentración de hemoglobina por debajo de los niveles límites de referencia para la edad, el sexo y el tiempo de embarazo[5].

La anemia infantil es una afección al cuerpo del infante que lo priva de tener suficientes glóbulos rojos sanos para oxigenar a los tejidos y células. La anemia se produce cuando la cantidad de hemoglobina en la sangre del infante es demasiado baja, la misma que puede medirse en el laboratorio con el análisis de sangre simple. La medición de hemoglobina es el criterio clave para la prueba de anemia. La cantidad, el tamaño y la forma de los glóbulos rojos indicarán el tipo de anemia.

Durante el exitoso segundo gobierno del presidente aprista Alan García (2006-2011), lo que la anemia infantil estaba en el 58 % en el año 2006 se redujo al 41 % en el 2011, es decir este flagelo se redujo significativamente, es decir 3.4 % anualmente tras aplicarse una política social sostenida y orientada a fortalecer el capital humano.

En el año 2017, entre las niñas y niños de 6 a 35 meses de edad el 43,6% sufrió de anemia. En el área rural este porcentaje fue mayor en comparación con el área urbana (53,3% y 40,0%, respectivamente). En el año 2018, la prevalencia de la anemia en niñas y niños de 6 a 35 meses de edad fue 43,5%. Estamos en el año 2021 y contamos con más anemia, desnutrición, pobreza y desempleo, prevaleciendo los tres tipos de anemia según el nivel de carencia de hierro.: anemia leve, anemia moderada y anemia severa.

Contribuir, a nivel nacional, con la reducción de la prevalencia de anemia materno infantil y desnutrición crónica infantil – DCI, a través del fortalecimiento de intervenciones efectivas en el ámbito intersectorial” es el objetivo general del documento técnico “Plan Nacional para la Reducción y Control de la Anemia Materno Infantil y la Desnutrición Crónica Infantil 2017-2021” del Ministerio de Salud de Perú (aprobado por Resolución Ministerial N° 249-2017/MINSA, de fecha, Lima,12 de abril de 2017) y cuya proyección de meta de reducción de anemia infantil al año 2021 sería de 19 % en niñas y niños de 6 a 36 meses de edad (2016 (43. 6 %), 2017 (37,9 %), 2018 (33,2 %), 2019 (28,5 %), 2020 (23,8 %) y 2021 (19 %).[6]

El referido Plan incluye diversas estrategias como la suplementación con hierro a niños, gestantes y adolescentes, la consejería nutricional a madres, el desarrollo de alimentos fortificados, la ligadura tardía del cordón umbilical, la desparasitación, entre otras acciones[7]. Lo cumplirá? Está por ver.

En virtud a la anemia, por la concentración baja de hemoglobina,  el número de glóbulos rojos  en los niños se reduce a un nivel muy bajo que no satisface las necesidades del organismo cuyas células en los músculos y órganos del niño necesitan oxígeno para sobrevivir.

Si la anemia no se controla, si no disminuye ni se erradica oportunamente, entonces en mediano y largo plazo cientos de miles de niños no alcanzarán el desarrollo psicomotor, cognitivo, emocional y social  óptimo, tendrán serios problemas para insertarse al mercado laboral, disminuirá la capacidad física y productividad y no podrían contribuir significativamente al crecimiento, desarrollo y progreso del Perú.

A manera de precedente, con los gobiernos de Ollanta Humala Tazo, Pedro Pablo Kuczynski y Martín Vizcarra Cornejo, la anemia infantil ha vuelto a crecer, por la falta de una eficaz política pública, el derroche presupuestal, el cambio de nombre de programas sin sustento técnico, la desintegración de objetivos y metas, el desgobierno y la pérdida de tiempo en dedicarse a perseguir política y judicialmente al adversario,  el incremento de la burocracia y de partidas excesivas y hasta innecesarias de publicidad del Estado en la concentración de los medios impresos y canales de televisión de empresas privadas, la ineficiencia y la corrupción.

Al respecto refiere Miguel Gogny: “En Perú se redujo la pobreza monetaria de forma fulminante durante el quinquenio 2006-2011 pasando del 49 % al 26 % (bajó casi a la mitad), la desnutrición cayó de 30 % a 19.5 % (bajó un tercio) y la anemia se redujo de 57 % a 41 %; ahora -2019- subió a 44 % lo que equivale a 1 millón de niños menores de 5 años sin futuro por escaso desarrollo cerebral. Esto es reflejo del crecimiento de la pobreza monetaria, principalmente en el ande rural pero sobre todo del desastroso trabajo de los gobiernos de Humala, PPK y Vizcarra frente a este flagelo.”[8], Este mismo autor señala: “Luego de los grandes logros contra la anemia hasta el año 2011, el nuevo gobierno de Ollanta Humala desarticuló los programas de lucha contra la desnutrición infantil del plan nacional contra esta enfermedad que venía de la gestión de Alan García y que trataba de unir los esfuerzos de los diferentes ministerios. Lamentablemente el lobista Kuczynski y el constructor Vizcarra han demostrado ser tan indiferentes con nuestros niños y su futuro…”

En el Perú es alta la prevalencia de anemia en niñas, niños de 6 a 35 meses de edad, afectando al 43.5% de esta población (Endes 2018). Durante el año de 2019 los mayores niveles de anemia en niñas y niños de 6 a 35 meses de edad se registraron en la Sierra (48.8%), seguido de la Selva (44.6%), Resto Costa (37.5%) y Lima Metropolitana (30.4%), el porcentaje de las niñas y niños con anemia es mayor en los que residen en el área rural (49%) que en el área urbana (36.7%), así lo informó el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) de acuerdo a los resultados de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes). Asimismo, según la información proporcionada se registró la mayor prevalencia de anemia en los departamentos de Puno (69.9%), Cusco (57.4%), Huancavelica (54.2%), Ucayali (53.7%), Loreto (53%), Junín (52.6%), Madre de Dios (51.4%) y Pasco (50.2%). Por el contrario, se observó menor prevalencia de anemia en Cajamarca (28.7%), Provincia de Lima (29.8%), Tacna (32.7%), Moquegua (33.2%), Arequipa (33.9%) y La Libertad (34.2%).

 

DEFINICIÓN DE TÉRMINOS

Ácido fólico: vitamina hidrosoluble, actúa como coenzima en la transferencia de un carbono.

Alimentación complementaria: alimentación de un niño pequeño con alimentos que se añaden a la leche materna o a sustitutos de la leche materna.

Alimentación de reemplazo: alimentación de un bebé que no recibe leche materna, y que cubre todas las necesidades del niño. Durante los primeros seis meses de vida este alimento debe ser una fórmula sustituta de la leche materna.

Alimentos enriquecidos: alimentos a los cuales se ha añadido una determinada cantidad de un nutriente para mejorar su valor nutricional. Ejemplos son: sal enriquecida con yodo, harinas de cereales con vitaminas del complejo B y hierro.

Alimentación saludable: alimentación con una cantidad y variedad de alimentos suficiente para cubrir las necesidades de energía y de nutrientes de los infantes.

Anemia: estado en el que la cantidad de glóbulos rojos es muy bajo  para poder transportar oxígeno.

Anemia ferropénica: es la anemia producida por eritropoyesis deficiente en hierro, debido a la falta o disminución de este en el organismo.

Anemia macrocítica: anemia caracterizada por eritrocitos más grandes de lo normal (macrocitos) en los que está ausente el área pálida central habitual.

Anemia nutricional: enfermedad caracterizada por la producción inadecuada de hemoglobina o eritrocitos debido a deficiencia nutricional de hierro, ácido fólico o vitamina B12.

Apoferritina: proteína que fija el hierro de los alimentos en la mucosa intestinal.

Consentimiento informado: procedimiento por el cual se garantiza que en una investigación de la anemia infantil la madre expresa voluntariamente su intención de participar en la investigación, después de haber comprendido la información que se le ha dado, acerca de los objetivos del estudio, los beneficios, sus derechos y responsabilidades.

Coordinación: es la actividad muscular regulada desde procesos sensoriomotores, intelectuales y perceptivo-comprensivos del infante.

Deficiencia de hierro: nivel bajo de hierro en la sangre u otros tejidos que impide al cuerpo del infante funcionar de forma adecuada.

Desarrollo psicomotor: es la adquisición progresiva y continuada de habilidades que se observa en el niño durante toda la infancia.

Desnutrición: severo déficit de peso causado por una ingesta alimentaria insuficiente y enfermedades infecciosas frecuentes. Disminuye las defensas del organismo y aumenta la mortalidad. En el niño produce un retraso del crecimiento y desarrollo psicomotor. En el escolar produce disminución del rendimiento escolar.

Eritrocitos: glóbulos rojos maduros.

Estrategia: plan general para lograr uno o más objetivos generales o a largo plazo en condiciones de incertidumbre (Wikipedia).

Glóbulos rojos: transportan oxígeno a las células del cuerpo y eliminan el dióxido de carbono; contienen hierro en la hemoglobina y se pueden mantener durante 35-42 días.

Grupos vulnerables: grupos de una población más expuestos a la desnutrición o a la inseguridad alimentaria. En general son más vulnerables los menores de 5 años, embarazadas, mujeres en períodos de lactancia, los ancianos y los enfermos de bajo nivel socioeconómico.

Hemoglobina: componente de los glóbulos rojos y que permite transportar oxígeno y CO2 .

Motricidad:  facultad que se desarrolla mediante el sistema nervioso central, músculos y articulaciones que permiten perfeccionar los movimientos del cuerpo en manos, dedos, brazos y piernas como trepar, arrastrarse, bailar, correr, saltar, etc.

Política: conjunto de decisiones, principios y normas que orientan la adopción de medidas orientadas a alcanzar objetos y metas, para legitimar y ejercer el poder que permita satisfacer necesidades de un país, sector, institución u organización.

Salud pública: conjunto de actividades organizadas por las Administraciones públicas, con la participación de la sociedad, para prevenir la enfermedad así como para proteger, promover y recuperar la salud de las personas del territorio o región, tanto en el ámbito individual como en el colectivo y mediante acciones sanitarias, sectoriales y transversales (Ley 33/2011, de 4 de octubre, General de Salud Pública)

Suplementos alimenticios: productos a base de hierbas, extractos vegetales, alimentos tradicionales, deshidratados o concentrados de frutas, adicionados o no, de vitaminas o minerales, que se pueden presentar en forma farmacéutica para incrementar la ingesta dietética total, complementaria o suplir alguno de sus componentes (Héctor Nebot García, Diccionario jurídico mexicano de bioética).

 

SÍNTOMAS

Los signos o síntomas más frecuentes de la anemia en los niños y las niñas son: piel, mucosas, mejillas y labios pálidos; mal humor, dolor de cabeza, desmayos, mareo, aturdimiento o vértigo, aceleración del ritmo cardíaco o latidos del corazón irregulares, piel y ojos amarillentos, orina de color del té, rápido cansancio o sensación de falta de energía, tomar siestas diarias con más frecuencia; dificultad para respirar al correr, jugar o subir escaleras, dolor en el pecho, apetencia por comer tierra, hielo, arcilla y almidón de maíz, retraso en el aprendizaje, caída del pelo, alteraciones en las uñas, falta de apetito, hinchazón o inflamación de las manos y los pies, la boca o la lengua en un tono blanquecino, manos y pies fríos, entre otros.

Son finalmente signos o síntomas de la anemia infantil: sudor, respiración rápida, pulso débil, sed en exceso y calambres en las piernas.

 

CAUSAS

Son causas de la anemia en la primera infancia: el incorrecto funcionamiento de la médula ósea;  el reemplazo temprano de la leche materna por cualquier otro producto lácteo; enfermedades de tuberculosis, paludismo, fiebre tifoidea, leucemia, cáncer,  enfermedad renal, enfermedad de la médula ósea o el lupus y enfermedad de Crohn; la deficiencia de micronutrientes como vitamina A y folato; la deficiencia de vitaminas (por la falta de ácido fólico, vitamina B12 o vitamina E en la dieta);  la escasa práctica del corte tardío del cordón umbilical en los niños y niñas que nacen; la intoxicación progresiva por plomo; la pérdida de demasiados glóbulos rojos (debido a sangrados); la producción insuficiente de glóbulos rojos sanos debido a la recepción insuficiente de hierro en los alimentos; la quimioterapia para el cáncer puede impedir que la médula ósea produzca suficientes glóbulos rojos; las infecciones urinarias y tumores; los episodios frecuentes de infecciones diarreicas y parasitosis; los factores sociales: bajo nivel educativo de la madre, insalubridad de la vivienda, malos y escasos hábitos de higiene, deficiente alimentación y nutrición e  insuficiente información de las familias sobre la importancia de la alimentación saludable.

 

CONSECUENCIAS

La anemia reviste las siguientes consecuencias en los infantes: palidez de rostro, cansancio, disminución de la capacidad de sociabilización, bajas defensas, mayor riesgo de contraer enfermedades infecciosas, deterioro en la maduración del cerebro, déficit de atención, respuesta inmunológica disminuida, retraso en la capacidad de lectura, déficit en el rendimiento escolar e impacto negativo en el  crecimiento físico, el posible bajo nivel de desarrollo psicomotor, cognitivo, emocional y social, la mortalidad neonatal, disminución del coeficiente intelectual, entre otras.

La anemia produce efectos negativos sobre la inmunidad, lo que hace al niño o a la niña  susceptible de adquirir enfermedades infecciosas. Y durante la etapa gestacional condiciona mayor riesgo de prematuridad y bajo peso al nacer (Colegio Médico del Perú).

Como consecuencia de la anemia infantil el futuro del Perú devendría en nubloso e inseguro, toda vez que contribuye a generar y agudizar las desigualdades sociales, culturales y económicas y con el tiempo habría ciudadanos disminuidos en sus capacidades y potencialidades, ciudadanos de segunda clase, marginados o excluidos del mercado laboral, con limitadas posibilidades de desarrollo intelectual y limitaciones laborales competitivas.

 

TRATAMIENTO

El tratamiento de la anemia infantil depende de la gravedad y de su origen. Se efectúa efectuando una serie de acciones: comiendo más alimentos ricos en hierro ( carnes rojas,  hígado, sangrecita, cereales y granos enriquecidos, frijoles secos y tofu); verduras (col forrajera, espinaca, hojas de col verde y alcachofa), pescado, mariscos y aves de corral, soya, frutas secas, panes y granos fortificados; haciéndose tratar con un médico especialista;  ingiriendo suficiente hierro en la dieta; recibiendo transfusión de sangre en caso de ser necesario en ciertos tipos de anemia; tratando con medicamentos las infecciones y parasitosis; tratándose la médula ósea para que produzca más células sanguíneas.

 

ACCIONES BÁSICAS DE POLÍTICA

Para  prevenir, combatir y erradicar la anemia en la primera infancia en el Perú proponemos algunas acciones básicas de política:

a)       Administrar adecuadamente los suplementos de hierro a los niños y niñas a partir de los cuatro meses;

b)      Capacitar permanentemente al personal de salud, y a las madres de familia para que puedan alimentar mejor a sus hijos menores;

c)       Intensificar la investigación de la problemática de la anemia en el Perú para que sus resultados sirvan como valiosos aportes para brindar a los médicos, docentes, tutores y madres de familia información relevante que permita realizar orientaciones y consejerías oportunas sobre el caso.

d)      Esperar de dos a tres minutos después de dar a luz para el pinzamiento o corte del cordón umbilical;

e)       Intensificar la implementación del programa de suplementación nutritiva;

f)    Incrementar la cobertura de los servicios de salud en áreas rurales y urbanas para atender a la población objetivo;

g)     Intensificar la realización de exámenes de hemoglobina para determinar la eficacia de los micronutrientes;

h)      Mejorar la atención sanitaria preventiva de los niños;

i)  Monitorear y medir el impacto de las intervenciones contra la anemia infantil en poblaciones rurales y urbanas;

j)       Promover el consumo de alimentos rico en hierro en las zonas rurales y el consumo de una dieta saludable y variada;

k)    Promover la participación sostenida, efectiva y conjunta de los programas sociales, universidades públicas y privadas, gobiernos regionales y gobiernos locales;

l)       Promover una adecuada alimentación a la madre gestante y a los niños y niñas;

m)    Realizar campañas de despistaje de anemia infantil;

n)  “Sería ideal establecer como requisito principal para todos los educadores una formación mínima en Neuroeducación, así como para los padres de familia y toda la comunidad. La primera infancia es compromiso de todos”. (http://www.iin.oea.org/pdf-iin/rh/primera-infancia-esp.pdf)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 



[1] Primera infancia: una mirada desde la neuroeducación. http://www.iin.oea.org/pdf-iin/rh/primera-infancia-esp.pdf

[2] Claudia Lisseth Palacios Cardoza. “Prácticas en prevención de anemia en madres de niños de 6-36 meses, CESAMICA, Enero-marzo, 2019”, Tesis para optar el título profesional de Enfermería, Piura, Perú, 2019. http://repositorio.unp.edu.pe/bitstream/handle/UNP/1709/CSS-PAL-CAR-2019.pdf?sequence=1&isAllowed=y

[3] Colegio Médico del Perú. Consejo Regional III. Lima. Gestión 2018-2020. Reportes de política de salud.  N° 1. Lima, mayo 2018. ”La anemia en el Perú. ¿Qué hacer? https://cmplima.org.pe/wp-content/uploads/2018/06/Reporte-Anemia-Peru-CRIII.pdf

[4] UNESCO - Educación para Todos. En http://www.unesco.org/education/ efa/ed_for_all/dakfram_spa.shtml

[5] World Health Organization. Iron deficiency anaemia: Assessment, prevention and control. A guide for programme managers. Fecha de consulta: 10 de julio de 2014. Disponible en: http://www.who.int/nutrition/publications/en/ ida_assessment_prevention_control.pdf.

[6] Proyección Fuente: Instituto Nacional de Estadística e Informática. ENDES. Marzo 2017

[7] Nelly Zavaleta, artículo “Retos y oportunidades al 2021”, en Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Pública. https://rpmesp.ins.gob.pe/index.php/rpmesp/article/view/3281/2906#:~:text=LimaPeru/anemia,esfuerzosdelgobiernoporreducirla.

[8] Miguel Gogny, en el artículo “El trío de la anemia: Humala-Kuczynski-Vizcarra”. Semanario PRESENTE, Edición N° 3, Lima, miércoles 13 de febrero de 2019, p.8.

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