NIVEL EXPLORATORIO DE LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA
Escribe: Eudoro Terrones Negrete
Este
primer nivel de la investigación científica llamado también formulativo, consiste en efectuar un estudio superficial,
preliminar, básico y de reconocimiento del aspecto externo del hecho, fenómeno
o problema que será materia de investigación, o en diagnosticar la realidad,
con el fin de identificar y destacar sus aspectos fundamentales, obtener una
visión de conjunto, de tipo aproximativo, referente a determinado hecho,
fenómeno o problema que ha sido poco explorado y conocido anteriormente, que
requiere su estudio bajo un nuevo enfoque y que permitirá, profundizar en el
tema, determinar los procedimientos adecuados y viables y para abrir líneas de
investigación adecuadas para realizar una investigación que llegue a buen
puerto.
En
el nivel exploratorio, el investigador “recoge información pertinente sobre la
factibilidad, posibilidad y condiciones favorables, para sus fines
investigativos. En esta etapa también se debe determinar el problema, el
objetivo y fines de la investigación, las personas que participarán, las
instituciones de coordinación, el presupuesto, financiamiento, etc.” refiere
Sergio Carrasco Díaz en su obra “Metodología de la Investigación Científica”.
El
nivel exploratorio de la investigación tiene por objetivo “la formulación de un
problema para posibilitar una investigación más precisa o el desarrollo de una
hipótesis”. “Pero tienen otras funciones como la de aumentar la familiaridad
del investigador con el fenómeno que va a investigar, aclarar conceptos,
establecer preferencias para posteriores investigaciones” (Claire Selltiz et
all,1965). Asimismo “el auxilio al investigador tanto para definir más
concretamente el fenómeno, como en la manera en que debe realizar el estudio”
(Pick de Weiss, Susan y Ana Luisa López Velasco de Faubert).
Al
respecto, Tafur Portilla manifiesta: “Al realizar esta actividad el
investigador universitario crea las mejores condiciones para continuar su investigación.
Afinca su propuesta de investigación sobre bases más sólidas, establece
fundamentos de la investigación ulterior”.[1]
Selltiz,
Jahoda, Deustch y Cook[2]
señalan las siguientes funciones de este tipo de estudios: formular
problemas;desarrollar
hipótesis; familiarizar
al investigador con el fenómeno que desea estudiar; aclarar
conceptos; establecer
preferencias para posteriores investigaciones; reunir
información acerca de posibilidades prácticas para llevar a cabo
investigaciones en marcos de vida actual; proporcionar
un censo de problemas considerados como urgentes por personas que trabajan en
un determinado campo de las ciencias sociales”
“Este
nivel de investigación sirve para ejercitarse en las técnicas de documentación,
familiarizarse con la literatura, bibliografía, hemerografía, tesis y fuentes
electrónicas. Por ello algunos hablan de investigación bibliográfica” (Humberto
Ñaupas et al, Lima, 2011:66).
El
estudio de la documentación implica consultar las fuentes históricas,
bibliográficas y estadísticas, los informes y estudios existentes, el material
cartográfico, los archivos oficiales y privados, obras literarias,
documentación personal que tiene el investigador y lo procesado y difundido por
los medios escritos, radiales, televisivos y electrónicos. Y finalmente, se
efectúa contactos directos con personas e instituciones que están en
condiciones de proporcionar información sobre el tema de investigación a
realizar.
Según
Lourdes Münch y Ernesto Ángeles el nivel investigativo exploratorio “se realiza
cuando no se tiene una idea específica de lo que se desea estudiar o cuando el
fenómeno es poco conocido por el investigador. Su objetivo es ayudar a definir
el problema, establecer hipótesis y determinar la metodología para formular un
estudio de investigación definitivo. En este tipo de investigación no se llega
a conclusiones definidas ni generales”.[3]
Para
el maestro universitario sanmarquino Julio Mejía Navarrete, este nivel de la
investigación científica cumple las funciones siguientes:
- Aumentar
la familiaridad del investigador con el fenómeno que estudia, motivando un
estudio más consecuente y mejor estructurado.
- Aclarar
conceptos y teorías con los que se pretende llevar una investigación.
-
Establecer
preferencias temáticas para posteriores investigaciones.
- Resumir
información acerca de posibilidades prácticas para la realización de
investigaciones, en marcos de la vida actual.
- Realización
de estudios diagnósticos de carácter preliminar, en donde se delimiten los
problemas más agudos y de inmediata solución práctica, en una comunidad donde
no se puede esperar una investigación más sistemática.[4]
Carlos
E. Méndez A., indica que para definir el carácter exploratorio del estudio han
de tenerse en cuenta consideraciones importantes: el conocimiento previo que
tiene el investigador sobre el problema planteado, los trabajos realizados por
otros investigadores, la información no escrita que poseen personas que por su
relato pueden ayudar a reunir y sintetizar sus experiencias”[5]
Este
mismo autor considera como estudios exploratorios: “las monografías e
investigaciones bibliográficas que buscan construir un marco teórico de
referencia, o las orientadas al análisis de los modelos teóricos. Los trabajos
genéricos referidos a la teoría de mercados, producción, finanzas,
administración del recurso humano, moneda y banca, comercio exterior,
microeconomía, macroeconomía, hacienda pública, auditoría, revisoría fiscal,
costos, estados financieros, etc., son ejemplos que por su contenido, más de
tipo teórico, pueden constituirse en estudios exploratorios” (Carlos E. Méndez
A., 2001:135).
[1] Tafur Portilla, Raúl. La Tesis Universitaria. Editorial
Mantaro, Primera edición, Lima, 1995, p.43.
[2] Selltiz, et al. Métodos de
investigación en las relaciones sociales. Rialp, Madrid, 1965.
[3] Münch,
Lourdes y Ernesto Ángeles. Métodos y
técnicas de investigación. Editorial Trillas, Tercera edición, 2007, p.30.
[4] Mejía Navarrete, Julio. La investigación social (Introducción). Cuadernos de Teoría y
Metodología. Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima, setiembre de 1983,
p.28.
[5] Méndez A., Carlos E. Metodología, diseño y desarrollo del proceso
de investigación. McGraw Hill Interamericana S.A., Impreso por Editorial
Nomos S.A., Tercera edición, Colombia, 2001, p.135.