LA ÉTICA POLÍTICA EN EL PERÚ
Escribe: Dr.
Eudoro Terrones Negrete
.INTRODUCCIÓN
En términos generales, toda persona tiene necesidad de contar con normas,
pautas o reglas de comportamiento en su vida de relación con el fin de designar
la bondad o maldad de los actos diarios, o emitir un juicio de valor sobre su
comportamiento propio y el de los demás. A esto se denomina exigencia ética y que se hace extensivo
a todo ciudadano, legislador y gobernante de un país civilizado.
La preocupación del hombre por sí mismo, por su buen vivir, por su acción
correcta o buena conducta y el comportarse bien, ordenadamente o según las
leyes de un país se denomina Eupraxia.
Por la ética individual se
determina los deberes del individuo y se regula su comportamiento ético en las
relaciones consigo mismo, con sus semejantes y la sociedad.
La ética política enseña que todo buen ciudadano, legislador y
gobernante debe mirar siempre el lado bueno de las cosas, evitar los
privilegios e intereses de grupos y trabajar con dedicación, esmero y sabiduría
por el bien común.
Todo ciudadano tiene el deber de elegir con responsabilidad a sus autoridades, legisladores y gobernantes y de
pagar sus impuestos con puntualidad.
El gobernante está al servicio de los ciudadanos y es el responsable del
bienestar colectivo y la seguridad de todos los miembros del estado. Es responsable
del buen vivir de las personas, utilizando los procedimientos y medios lícitos
posibles.
CONCEPTO
Se define la ética política como la parte de la ética que se ocupa de los principios, normas y valores de acción que deben regir la actividad o conducta del político, sea ciudadano, legislador o gobernante, que permiten la buena convivencia, la equidad y la cooperación social para fomentar y alcanzar el bien común, el respeto al estado de Derecho y la protección de los derechos fundamentales de las personas.
IMPORTANCIA
En el Perú, como
en cualquier país de América Latina y el Mundo que están atravesando por una
crisis integral, es muy importante e imprescindible. El cultivo y praxis de la
ética política por los ciudadanos, legisladores y gobernantes permite lograr el
desarrollo sostenible y equitativo de la sociedad, recuperar y fortalecer la legitimidad de las
instituciones, fomentar la eficiente participación ciudadana, consolidar la
democracia y el estado de derecho y
reducir la desigualdad, la pobreza e injusticia social.
PROBLEMÁTICA
Desde hace décadas
el Perú enfrenta un escenario político y ético preocupante y crítico, con altos
índices de corrupción e inmoralidad en las empresas públicas y privadas, con educación
cívica de baja calidad, con prácticas clientelistas y populistas, con desconfianza
e incredulidad en las instituciones, los partidos políticos y poderes del
estado.
Atentan contra la
ética política el desvío de recursos públicos para fines privados, la entrega
de dinero previamente por la aprobación de contratos de obras públicas, y la
manipulación de los resultados de las elecciones municipales, regionales y
nacionales.
La realización de
algunas reformas de instituciones públicas y la aprobación de leyes para
potenciar y fortalecer la gestión pública no han sido suficientes para
erradicar las prácticas de la corrupción en los poderes del Estado peruano. Aún
persiste la resistencia a la transparencia en la gestión pública, persiste la resistencia
a la rendición de cuentas con claridad, precisión y documentadamente, persiste la
falta de consenso para encarar con sabiduría y eficiencia el grave problema de
la corrupción, persiste la falta de respeto por los derechos humanos y la falta
de mecanismos efectivos de acceso oportuno a la información.
Además, es preocupante la falta de cultura política
en las instituciones del tradicional Estado peruano, como también lo es la
práctica del nepotismo, el amiguismo, el compadrazgo, la politización de la
justicia y la judicialización de la política.
El caso de corrupción más grande de la historia
política de Perú y América Latina es el de ODEBRECHT y LAVA JATO, que involucra
a altos funcionarios y presidentes de la República de varios gobiernos, cuyos
resultados concretos de las investigaciones y sanciones el pueblo peruano
espera saber y ser informado oportunamente.
PROPUESTAS
DE SOLUCIÓN A LA POLÍTICA CORRUPTA
Comparto con la propuesta de solución a la política
corrupta, elaborada por la Inteligencia Artificial ChatGPT:
1.
Fortalecimiento institucional:
Garantizar la autonomía de los poderes del Estado y la independencia del
sistema judicial.
2.
Reformas legales:
Endurecer las penas por delitos de corrupción y establecer mecanismos eficaces
de control.
3.
Fomento de la cultura ética:
Desarrollar programas de educación cívica y ética desde el nivel escolar.
4.
Participación ciudadana
activa: Impulsar el control social mediante veedurías y
observatorios ciudadanos.
Debo expresar, finalmente, que la política corrupta merece ser combatida
permanentemente por los ciudadanos, legisladores, gobernantes y medios de
comunicación social.