I
EL APRISMO ES UN
PARTIDO ANTIMPERIALISTA
El Partido trata de formar conciencia
antimperialista en las clases trabajadoras. Conciencia de que son ellas las que
producen el imperialismo y que son sólo
ellas las que pueden imponerle condiciones y constituir una fuerza de liberación,
sin esperar que los proletarios de Europa y los Estados Unidos destruyan el
sistema capitalista origen del imperialismo. (2)
Nuestro Partido Antimperialista es una
«Alianza Popular», Alianza de todas las fuerzas populares nacionales afectadas por el imperialismo... Nuestra
misión histórica como Partido es la de alejar el peligro imperialista de
nuestros países. Los cinco puntos de nuestro Programa Máximo fijan bien
claramente los grandes medios para la realización de este fin. (3)
La causa anti-imperialista del APRA no supone
una lucha nacionalista contra el pueblo norteamericano, sino contra el sistema
económico, político y social bajo el que está sojuzgado y en cuyo nombre se
cometen las más flagrantes violaciones del derecho de los pueblos débiles. (4)
El APRA quiere cumplir la tarea histórica de
defenderse contra esa política de «franca agresión económica» porque sabe que
«trae consigo una dictadura política». (5)
La Ideología Aprista encarna todas las
aspiraciones de los antimperialistas de América Latina. Defensa de la amenaza exterior;
acusación y castigo del enemigo interior. Nosotros no hacemos ni podemos
desarrollar una acción unilateral. Contra el enemigo de fuera y contra el
enemigo de dentro es nuestra consigna. (6)
La actitud del Aprismo es anti-imperialista,
contra cualquier imperialismo, americano, europeo o asiático, pero no es
xenófobo, ni jingoísta, ni adverso a la formación de un vigoroso y bien
equilibrado sistema de relaciones económicas y culturales entre el Perú, los
países de Indoamérica y los Estados Unidos y otras naciones poderosas del orbe.
(7)
Y un Partido Antimperialista Indoamericano,
con sentido de nuestra realidad social, debe ser un Partido Nacional de Frente
Unico, que agrupe todas las clases sociales amenazadas por el imperialismo.
Debe ser, también, un Partido con Programa y tácticas propias, realistas y
eficientes y con comando nacional.(8)
La tarea histórica de un Partido
Antimperialista consiste, en primer término, en afirmar la soberanía nacional
librándose de los opresores de la nación y capturando el Poder, para cumplir su
propósito libertador. ¡Difícil y larga tarea en la que la ayuda de las clases
medias, beneficiadas por este movimiento libertador, se hace necesaria. (9)
En varias oportunidades he aludido a la
semejanza del movimiento antimperialista chino con el movimiento
antimperialista nuestro. En un discurso pronunciado durante la cena
conmemorativa de la revolución china en Londres, el 11 de octubre de 1926, hice
hincapié en que «el único Frente Antimperialista semejante en su origen al
chino, es el indoamericano, y el único Partido Antimperialista del tipo que
tuvo el Kuo-Min-Tang al fundarse, es el Apra». Insisto en el paralelo, a pesar
de necesarias distinciones específicas, recordando que la traducción literal de
las tres palabras que denominan el poderoso organismo político chino significan
en nuestra lengua Partido Popular Nacional. Los vocablos «popular» y
«nacional», que expresan claramente la tendencia de frente único del
Kuo-Min-Tang, pertenecen a la denominación aprista también. (10)