EL HOMBRE ES UN SER BIOLÓGICO
Escribe: Dr. Eudoro Terrones Negrete
Desde el punto de vista biológico, el hombre es considerado como el grado supremo del desarrollo de los animales en la Tierra. Biológicamente, el hombre es un animal pero de tipo racional, con determinadas estructuras cerebrales complejas. El sistema nervioso central lo hace capaz del pensamiento abstracto, del lenguaje y capaz de tener una representación mental y una explicación del mundo. El cerebro humano contiene alrededor de diez mil millones de neuronas que con los elementos fundamentales, necesarios e imprescindibles de la función cerebral. Cada neurona dispone de mil a diez mil sinapsis o conexiones con las neuronas adyacentes.
El hombre como ser biológico está también provisto de hormonas, tiene necesidades de alimentación, tiene instintos.
El hombre se diferencia de los animales más desarrollados, por la conciencia, por el lenguaje articulado. La conducta del hombre está directamente determinada por el pensamiento, por los sentimientos, por la voluntad, por el grado en que se conocen las leyes de la naturaleza y la sociedad.
«Biológicamente el hombre es un primate con un Sistema Nervioso Central complejo y altamente desarrollado. Y el pensamiento es una función de este sistema. Lo distintivo del hombre no es el pensamiento racional sino el pensamiento simbólico del cual la razón es una de sus formas» manifiesta Jorge Guillermo Llosa en su»Nueva ciencia del hombre» (Lima, 1986).
Como ser biológico, podríamos decir con las palabras de J. Rostand que el hombre es metazoario, artiozoario, cordado, vertebrado y mamífero: «El hombre es un metazoario, puesto que está formado por numerosas células diferenciadas. Es un artiozoario, ya que su cuerpo puede ser dividido por un plano medio en dos mitades simétricas. Es cordado, porque tiene un sistema nervioso organizado en la parte dorsal del cuerpo; es vertebrado, dado que tiene una columna vertebral; es mamífero, puesto que tiene mamas. Dentro de la clase de los mamíferos, pertenece al roden de los primates, cuyo nombre da testimonio de preeminencia orgánica, y que comprende a los animales plantígrados como él, poseyendo cinco dedos en la mano y cinco dedos en el pie, tres clases de dientes, dos mamas pectorales y hemisféricos cerebrales bien desarrollados» («El Hombre»)