EL PERIODISMO CIENTÍFICO
Escribe:
Dr. Eudoro Terrones Negrete
La
humanidad registra a la fecha grandes saltos tecnológicos propiciados por el
fuego, la palanca, la rueda, la imprenta, el automóvil, el avión, la radio, la
televisión, el telefax, las computadoras electrónicas, la antena parabólica y
el satélite de comunicaciones.
Y
no se descarta la creación de un hipersector formado por las
telecomunicaciones, la informática, la electrónica y los medios de comunicación
dando origen a una gran explosión comunicativa.
No
cabe duda de que los primeros periódicos científicos veían la luz a principios
del siglo XVIII, como es el caso del periodismo científico más antiguo
"Philosophical Transaction" que data de 1665. ´
El
periodismo científico tiene su fundamento en el párrafo I del artículo 27 de la
Declaración de Derechos del Hombre, adoptada por la Asamblea General de las
Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948, que dice: "Toda persona tiene
derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar
de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que
de él resulten".
En
1962 (16 al 18 de octubre), en Santiago de Chile se desarrolla el I Seminario
Interamericano de Periodismo Científico, el que concluye con el acuerdo de
creación del Programa Interamericano de Periodismo Científico, iniciado por el
Departamento de Asuntos Científicos de la OEA y el Centro Técnico de la
Sociedad Interamericana de Prensa.
En
Hispanoamérica el periodismo científico tiene sus orígenes en la Declaración
suscrita por los jefes de Estado americanos en Punta del Este (Uruguay) el 14
de abril de 1967, con el acuerdo tomado de crear un Programa Regional de
Desarrollo Educativo.
Desde
aquel entonces la nueva especialidad informativa conocida como "periodismo
científico" se expande por todos los países del mundo, haciendo partícipe
a los pueblos de los avances del conocimiento, creando conciencia pública sobre
el valor de la ciencia y de la tecnología al servicio de una sociedad
progresista.
Científicos,
educadores y periodistas se extienden la mano en los medios de comunicación
para hacer de éstos un gran foro público sobre los problemas y avances de la
ciencia y la tecnología. Se alienta tiempos nuevos en procura de la
democratización total del poder, de la ciencia, de la tecnología, de la
política, de la educación, del manejo empresarial económico-financiero, de los
sindicatos, de las organizaciones sociales de base y de los medios
informativos.
Empieza
entonces a surgir una nueva sociedad tecnológica pero no industrial. No le
falta razón a Manuel Calvo Hernando cuando dice: "Hasta ahora asociábamos
la tecnología con la sociedad industrial; ahora empieza a surgir una sociedad
tecnológica que no es una sociedad industrial, porque las fábricas y la
industria pesada, en unos casos se sustituye y en otros se transforma. Un buen
ejemplo que tanto nos afecta a nosotros es la sustitución paulatina del cobre
por la fibra de vidrio".
Al
abordar este nuevo periodismo "que está ahí, a la puerta de casa", no
podemos menos tener que manifestar que el mensaje periodístico debería
adoctrinar para que la población acepte determinados cambios positivos en sus
hábitos de consumo, en sus actitudes y formas de pensar, de querer y desear que
conlleven a la aceptación de las transformaciones estructurales de la sociedad.
Los
medios de comunicación deben por fin ser entendidos en su dimensión de una
escuela democrática y con interés social, que altera las concepciones
tradicionales de la propiedad, del poder, de la autoridad, del beneficiario y
usuario de los medios, de la población que no quiere vivir eternamente
marginado ni convertido en un peón más de intereses de colonización y
alienantes.
El
periodismo científico es un instrumento válido y eficaz al servicio de la
educación, la ciencia y la cultura. Y
dentro de esta óptica está llamado cuando menos a cumplir los objetivos siguientes:
Comprender la naturaleza, la realidad y la vida humana, científicamente. Contribuir
a que la ciencia y la tecnología sean auténticos instrumentos de transformación
social y de desarrollo integral del hombre. Contribuir al incremento de las
relaciones e interacciones entre ciencia, tecnología, comunicación y sociedad. Crear
una conciencia política sobre el valor de la investigación científica y
de una conciencia ecológica para la defensa de la naturaleza y del medio
humano. Crear y ampliar la capacidad para leer y entender la ciencia.
También
despertar y fomentar el desarrollo de la investigación básica y aplicada en el
quehacer profesional e institucional. Despertar y promover una conciencia
crítica en el individuo y la sociedad y sensibilizarlo sobre los fenómenos
del mundo contemporáneo. Enseñar al hombre a razonar científicamente sobre los
grandes problemas de la humanidad y a participar en del beneficio científico.
Finalmente,
son objetivos del periodismo científico evitar que el quehacer y los resultados
de la ciencia sean manipulados políticamente y por intereses extra científicos.
Hacer distinguir al público entre progreso científico y felicidad humana. Ofrecer
una idea clara y suficiente sobre el espíritu y el método científico. Posibilitar
que el saber y el uso de los medios de comunicación sean factores de igualdad,
de equilibrio democrático y de redención social entre los hombres.