PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE LA NUEVA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Escribe:
Dr. Eudoro Terrones Negrete
Los
principios rectores de la nueva educación universitaria en el Perú deberán
expresar la razón de ser y el quehacer de las universidades, sus estrategias y
acciones orientadas a cumplir su misión, sus funciones y a lograr sus objetivos
y metas.
En este
sentido, consideramos que la nueva educación universitaria en el Perú deberá
regirse por los principios fundamentales
siguientes:
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Principios
fundamentales de la nueva educación universitaria en el Perú |
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Autonomía |
Libertad de cátedra y responsabilidad |
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Cientificidad |
Libertad de investigación de frontera |
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Creatividad |
Nacionalismo |
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Criticidad |
Participación |
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Equidad social |
Pertinencia social |
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Eticidad |
Planificación |
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Excelencia |
Pluralismo |
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Flexibilidad |
Solidaridad |
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Innovación |
Transparencia |
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Integridad |
Unidad |
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Libertad de conciencia |
Viabilidad |
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Libertad de enseñanza |
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Autonomía: La existencia de las
universidades está garantizada por la Constitución política del Estado peruano,
por las leyes de la República, la Ley Universitaria, el Estatuto y los reglamentos de cada universidad.
Cada
universidad tiene la facultad de gobernarse en forma autónoma e independiente,
dentro del fiel respeto a la Constitución política, a las leyes y a los
Derechos Humanos.
La
autonomía de las universidades comprende los ámbitos siguientes: ámbito legal (dictarse normas estatutarias y reglamentarias que rijan su
vida institucional), ámbito académico (capacidad para
organizar sus estudios y programas de investigación, según las necesidades del
país), ámbito organizativo y administrativo (potestad de organizar
sus servicios administrativos y de nombrar y remover a su personal docente y
administrativo con sujeción a sus normas estatutarias y reglamentarias) y ámbito económico (elaborar, ejecutar y
evaluar su presupuesto y disponer de ello para el mejor cumplimiento de sus
fines).
Cientificidad: La universidad reconoce
el valor universal de la ciencia y la cultura de paz y aspira a lograr la
transformación de la sociedad a través de la investigación científica.
Creatividad: La práctica de la
investigación científica, humanística y tecnológica permite a la universidad
generar nuevos conocimientos en los diversos campos del saber, del arte, de la
cultura, la ciencia, las humanidades y la tecnología.
Criticidad: La universidad elabora
estudios y proyectos de desarrollo y realiza planteamientos de solución a los
problemas sociales, económicos, políticos, educativos, culturales, ecológicos,
etc., a la vez que promueve el diálogo, la participación y la concertación al
interior y exterior de la comunidad universitaria.
Equidad social: La universidad se funda
en el principio de equidad social para la prestación de sus bienes y servicios;
con igualdad de deberes, derechos y oportunidades educativas para todos.
Eticidad: Para el mejor cumplimiento de
su visión y misión, de sus objetivos, fines, funciones y metas, la universidad
requiere de la aplicación de principios y valores éticos básicos: amor por la
verdad, objetividad, honestidad, solidaridad, sensibilidad social, espíritu de
justicia, convivencia pacífica, libertad, independencia de criterio, dignidad,
tolerancia y responsabilidad.
Excelencia: Para responder a los
intereses, a las demandas y a los requerimientos de la sociedad peruana, la
universidad tiene que orientarse hacia la búsqueda y el logro de la excelencia
organizativa, académica y administrativa, dentro de los marcos legal y moral,
respectivamente.
Flexibilidad: Toda universidad trabaja
con parámetros flexibles, con capacidad de adaptación y de adecuación a los
cambios científicos, humanísticos, tecnológicos y a los grandes objetivos de
transformación nacional.
Innovación: La universidad es una
institución que está constantemente innovándose en sus propósitos de
autoevaluación, de aplicación de métodos, de técnicas de investigación
científica y de enseñanza con el fin de mejorar la calidad de la educación en
general y de la educación universitaria en particular, y solucionar sus
variados y múltiples problemas.
Integridad: La enseñanza universitaria
comprende al estudiante como individuo y como persona, en sus aspectos
humanísticos, científicos, tecnológicos, axiológicos y estéticos. Una educación
universitaria de calidad debe ser integral, es decir, abarcar todas las
potencialidades del estudiante.
Libertad de conciencia: La libertad de
conciencia o de pensamiento es la que permite que en la universidad se
manifieste y propague las distintas opiniones religiosas, sociales, políticas,
etc., sin oposición de las autoridades constituidas ni sanción por el ejercicio
de dicha libertad.
Libertad de enseñanza: La universidad
tiene la facultad de exponer a los demás las ideas y opiniones sobre las
materias de enseñanza de una determinada carrera profesional, sin obedecer a
presiones ni influencias del poder económico o político partidario. La libertad
de enseñanza supone la libertad de enseñar y de aprender.
Libertad de cátedra y responsabilidad: Derecho
inalienable y garantía del profesor universitario y de la universidad, para
impartir sin compulsiones, restricciones, limitaciones o dogmas sus enseñanzas,
dentro del marco jurídico y ético vigente en la sociedad peruana. Es la
práctica de su libertad pero con responsabilidad profesional, académica,
social, jurídica y ética.
Libertad de investigación de frontera: La
libertad de investigación de frontera tiene como objetivo que el estudiante o
futuro profesional aprenda, se perfeccione y avance traspasando límites del
conocimiento y superando los paradigmas actuales en beneficio de todos dentro
de la sociedad del conocimiento.
Nacionalismo_ La universidad defiende
la identidad nacional, la cultura nacional, los recursos y las riquezas
nacionales y el mar territorial, creando y promoviendo la conciencia cívica en
todo lo que legítimamente y por justicia le corresponde al Perú, como país
soberano, libre e independiente.
Participación: La universidad promueve
la participación activa, coherente, inteligente y responsable de los miembros
de la comunidad universitaria, con el fin de lograr su crecimiento y
desarrollo, afirmar y consolidar el sistema democrático, el ejercicio de la
libertad, la preservación y promoción de la cultura nacional y mundial.
Pertinencia social: El prestigio y el
éxito de toda universidad radica en su capacidad de respuesta y de propuesta
con programas y proyectos a los retos del país y de la sociedad del
conocimiento.
Planificación: Toda universidad tiene
el deber de planificar su crecimiento y su desarrollo de manera horizontal,
realista y con responsabilidad histórica y social, según las exigencias,
demandas o requerimientos del país.
Pluralismo: La universidad está abierta
a las diferentes filosofías, corrientes del pensamiento universal, ideologías,
creencias y doctrinas, a la ciencia, las artes, la tecnología, etc., sin
discriminación social, ética, religiosa o política ni oposición de las
autoridades legalmente constituidas.
Solidaridad: La universidad convoca y
fomenta la participación de la comunidad universitaria en los actos de
solidaridad humana.
Transparencia: La universidad se debe a
la sociedad y como tal tiene un compromiso histórico y social de ser
transparente en sus actos, en su gestión, en el manejo y la operación de las
actividades administrativas, académicas y económico-financieras.
Unidad: La universidad es un todo
unitario que funciona, relaciona, interrelaciona e integra de manera armónica,
realista y coherente sus direcciones, facultades, departamentos académicos,
escuelas profesionales y escuelas de posgrado, centros de extensión y
proyección social, centros e institutos de investigación, para lograr un
trabajo institucional y académico eficaz, eficiente y efectivo.
Viabilidad: El quehacer organizativo y
académico de la universidad se basa en normas, orientaciones, políticas, planes
estratégicos, programas, proyectos y fuentes financieras posibles de ser
realizados.
