Artículos periodísticos y de investigación

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7 de diciembre de 2024

El periodista político "conoce el juego de la política y sabe cómo se juega"

 

EL PERIODISTA POLÍTICO "CONOCE EL JUEGO DE LA POLÍTICA Y SABE CÓMO SE JUEGA"

Escribe: 

Dr. Eudoro Terrones Negrete


La política es la ciencia y el arte del buen gobierno al servicio de las mayorías nacionales. Es la participación y movilización condicionada de la ciudadanía en los asuntos y en la orientación del Estado.

El periodismo político es un tipo de periodismo especializado que está constituido por el conjunto de noticias, comentarios y críticas que anteceden y culminan el desarrollo de actividades relacionadas con elecciones municipales (gobierno local) y elecciones nacionales, regionales e internacionales.

El periodista político informa sobre los discursos políticos, los aplausos o abucheos del auditorio, sobre las manifestaciones y contramanifestaciones políticas. Detecta y comenta la grandilocuencia vacía de los oradores o su riqueza cultural, así como también informa y comenta sobre los últimos resultados de los sondeos de opinión realizados por empresas particulares o por algunos medios de comunicación.

Periodistas especializados en política se ocupan de las campañas y votaciones, cubren informaciones sobre los anuncios de candidaturas y alianzas electorales, sobre los planes de gobierno de los candidatos. El reportero político conoce a las autoridades que controlan la maquinaria de los partidos políticos y del Gobierno. Carl N. Warren diría con justa razón que el cronista político "Conoce el juego de la política y sabe cómo se juega".

Warren divide las noticias puramente políticas, según la cronología del período electoral, en tres grupos principales:

1. Informaciones sobre previsiones y cábalas preelectorales,

2. Informaciones sobre los discursos y declaraciones durante la campaña,

3. Informaciones sobre el resultado de las elecciones.

En el día de las elecciones, el periodista político conforma sus informaciones con afluencia de electores, con el estado del tiempo y su influencia en la concurrencia o en el ausentismo de los electores, con entrevistas de los candidatos, con informaciones relacionados a violencia, robo de votos y de ánforas, informaciones sobre inasistencia de personeros y de miembros de mesa, sobre acusaciones de fraude y pronósticos de la posible victoria de algún candidato.

El periodismo político forma parte de aquella prensa comprometida con la lucha de un sector social o de la inmensa mayoría nacional en procura del bienestar y progreso de los pueblos.

Dentro de este tipo de periodismo, el periodista toma posición política a favor y en defensa de la doctrina, ideología y filosofía de un determinado partido, movimiento, frente o alianza; dice su verdad o calla en forma consciente o inconsciente en función de los intereses de la camiseta política que lleva puesto, situación ésta que en muchos casos depara al periodista la persecución, la cárcel, el destierro, la privación de sus derechos ciudadanos, civiles y políticos, más aún si tiene que luchar contra un gobierno dictatorial o "de facto".

El periodismo político, a través del partido, movimiento, frente o alianza que representa, trata de lograr el dominio del Estado y determinar con su poder la organización, administración, conducción y transformación de la sociedad. Se orienta a un tipo de sociedad diseñado en el Plan máximo y Plan mínimo del partido político.

El periodista político está al servicio de determinado sector de la población y utiliza los medios de comunicación o la prensa para organizar, orientar e influir en determinados sectores sociales. En este sentido el periodista ya no es neutral e independiente ni pluralista, es un profesional comprometido con un partido político. a cuyos intereses sirve.

El periódico condiciona y limita la participación de opiniones contrarias al interés del partido político o de sus agentes económicos. El periódico se elabora sobre la base de consignas partidistas y está más preocupado en ganar adherentes a favor de su partido político. El periódico es de limitado tiraje, poco vende, tiene pocos anunciantes y es de bajo prestigio y consecuentemente tiene poco poder de influencia en el público y está sujeta a la restricción económica del grupo de poder económico que encarna. Se escribe para complacer al dirigente, al jefe del partido, a los fines y objetivos de la organización política. La página editorial está sometida a manipulaciones del partido y de los representantes de los grupos económicos que encarna.

En el periodismo político, la clase política determina que se debe decir y que no se debe decir, que se debe publicar y que no se debe publicar, determina cuales hechos informativos merecen la mayor o menor cobertura informativa. El medio de comunicación está al servicio del partido político y no necesariamente y como debe ser al servicio del público en general, se orienta más que todo al adoctrinamiento de masas

La función del medio de comunicación deviene mayormente en política y pedagógica, aunque su objetivo principal es organizar las fuerzas sociales para alcanzar el poder. Y según el tipo de partido político al que representa (de centro, de izquierda o de derecha), el periodista jugará un rol político a favor de las clases humildes, explotadas y desposeídas (que son los más) o de las clases dominantes, poderosas, explotadoras o reaccionarias (que son los menos).

La práctica del periodismo político conlleva una serie de inconvenientes y desventajas que lo resumiremos en los siguientes puntos: Deviene en fugaz y de poco éxito empresarial, poco influyente en la opinión pública para el cambio de las estructuras socioeconómicas del país. El periodista asume mayores riesgos, privaciones y limitaciones en el ejercicio de la profesión. Muchos excelentes y experimentados periodistas por no comulgar con los principios políticos del medio de comunicación se ven imposibilitados de ascender en los diversos cargos y son sistemáticamente hostilizados y marginados por el empleador. Muchos periódicos y medios de comunicación murieron en el camino a consecuencia de sus actitudes críticas contra el gobierno de turno. No puede servir de vehículo de información al servicio del poder, salvo casos que el partido de gobierno sea el partido cuyos principios y programas defiende.

En el periodismo político constituyen acontecimientos que deben ser difundidos y comentados los siguientes: elecciones, asambleas, convenciones y congresos de las organizaciones políticas y sindicales, conferencias diplomáticas, sesiones del Poder Legislativo, del Consejo de ministros, de los Concejos municipales, inauguraciones de locales partidarios, entre otros.

El periodista político estará enterado de los slogan de campañas de los partidos políticos, tales como los siguientes: "Limpieza en todo demandamos al Gobierno", "El Perú no se vende", "Petroperú para los peruanos", "Perú no cederá un milímetro de su territorio a Ecuador", "Mi compromiso es con el Perú y no con los extranjeros", "Patria, tierra, libertad y justicia", "No más impuestos que graben al pueblo", "Honradez, tecnología y trabajo", "Justicia social de Pan con Libertad", "Juntos, SI podemos", "Unidos, todo lo podemos; desunidos, nada somos", "Crearemos riqueza y empleo para el que no la tiene, sin quitarle al que la tiene", "Obras sí, palabras no",  "La moralización debe empezar por los moralizadores", "Centralismo No. Regionalización SI", "Basta ya de hambre, miseria e injusticia".

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