PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE LAS
UNIVERSIDADES DE CALIDAD
Escribe: Eudoro Terrones Negrete
Los principios fundamentales de las universidades de calidad expresan
la razón de ser y el quehacer de las universidades públicas y privadas, sus
tácticas, estrategias y acciones orientadas a cumplir sus misiones, visiones y
funciones, asegurar a los estudiantes una educación de calidad y lograr sus
objetivos, fines y metas planificados.
En este sentido, la educación universitaria de calidad deberá regirse por
los principios siguientes: autonomía, cientificidad, compromiso con el cambio
social, creatividad, criticidad, equidad social, ética, excelencia,
flexibilidad, innovación, integridad,
libertad de enseñanza, libertad y responsabilidad social de cátedra, libertad
de investigación de fronteras, nacionalismo, participación, pertinencia social,
planificación, pluralismo, solidaridad, transparencia, unidad y viabilidad.
Autonomía. La existencia de las universidades está garantizada por la Constitución
política, la ley general universitaria,
los estatutos y reglamentos de cada universidad.
Las universidades tienen la facultad de gobernarse de manera autónoma e
independiente, dentro del respeto a la normatividad legal vigente en cada país.
La autonomía comprende los ámbitos legal (dictarse normas
estatutarias y reglamentarias que rijan su vida
institucional), acadé-mico (capacidad para organizar sus estudios y
programas de investigación según las necesidades del país),organizativo,
administrativo (potestad de organizar sus servicios administrativos y de
nombrar y remover a su personal docente y administrativo con sujeción a sus
normas estatutarias y reglamentarias) y económico(elaborar, ejecutar y
evaluar su presupuesto y disponer de ello para el mejor cumplimiento de sus
fines).
Cientificidad. Las universidades reconocen el valor universal de la ciencia, la
tecnología y la cultura de paz y aspiran lograr la transformación de la
sociedad a través de la investigación científica. Sólo la ciencia puede
proporcionar el conocimiento fiable y la descripción fiel de la realidad tal
como es.
Compromiso con el cambio
social. Las universidades tienen el compromiso
histórico de contribuir con el cambio integral de las estructuras
socioeconómicas de los países, a la luz de los resultados de proyectos de
investigación científica que realizan.
Creatividad. La práctica de la investigación humanística, científica y tecnológica
permite a las universidades generar nuevos conocimientos en los diversos campos
del saber, el arte y la cultura.
Criticidad. Las universidades elaboran estudios y proyectos de desarrollo social,
económico, político, cultural, ecológico, turístico, etc., y formulan alternativas de solución a los
problemas, a la vez que promueven el diálogo, la participación y la concertación
al interior y al exterior de la comunidad universitaria.
Equidad social. Las universidades se fundan en el principio de equidad social para la
prestación de sus servicios; con igualdad de deberes, derechos y oportunidades
educativas para todos, sin marginación, discriminación ni exclusión social.
Ética. Para el mejor cumplimiento de su visión, misión, objetivos, fines,
funciones y metas, las universidades requieren de la aplicación de principios y
valores éticos: amor por la verdad, objetividad, honestidad, solidaridad,
sensibilidad social, espíritu de justicia, convivencia pacífica, libertad,
independencia de criterio, dignidad, tolerancia, responsabilidad (social,
jurídica y ética) y transparencia.
Excelencia. Con el fin de responder a los intereses, las demandas y los
requerimientos de las sociedades, las universidades deberán orientarse hacia la
búsqueda y el logro de la excelencia académica y administrativa, con libertad y
responsabilidad, dentro de los marcos legales y morales.
Flexibilidad. Las universidades trabajan
dentro de parámetros flexibles, con capacidad de adaptación y adecuación a los
cambios científicos, humanísticos y tecnológicos.
Innovación. Las universidades son instituciones que están constantemente
innovándose en sus propósitos de autoevaluación, de aplicación de métodos y
técnicas de investigación científica y de enseñanza con el fin de mejorar la
calidad de la educación en general y la educación universitaria en particular.
Integridad. La enseñanza universitaria comprende al estudiante como individuo y
como persona, en sus aspectos humanísticos, científicos, tecnológicos,
axiológicos y éticos. Una educación universitaria de calidad debe ser integral,
es decir abarcar todas las potencialidades del estudiante.
Libertad de enseñanza. Las universidades tienen la facultad de exponer a los miembros de su
comunidad universitaria las ideas y opiniones sobre las materias de enseñanza
de las carreras profesionales que ofertan a la sociedad, sin obedecer a
presiones e influencias del poder económico o político partidario. La libertad
de enseñanza supone la libertad de enseñar, de aprender y de investigar.
Libertad y responsabilidad
social de cátedra. La práctica de la libertad y la
responsabilidad social de cátedra es el derecho inalienable y la garantía de
los profesores universitarios y de las universidades, para impartir sin compulsiones,
restricciones, limitaciones o dogmas sus enseñanzas, dentro del marco académico-profesional, jurídico y ético en
vigencia.
Libertad de investigación de
frontera. La libertad de investigación de frontera
tiene como objetivo que el estudiante aprenda, se perfeccione y avance
traspasando los límites del conocimiento y superando los paradigmas vigentes en
beneficio de todos dentro de la sociedad global.
Nacionalismo. La universidad defiende la identidad y cultura nacional, los recursos y
riquezas nacionales y su mar territorial, creando y promoviendo la conciencia
cívica en todo lo que legítimamente y por justicia le corresponde al Perú, como
país soberano, libre e independiente.
Participación. La universidad promueve la
participación activa, coherente, inteligente y responsable de los miembros de
la comunidad universitaria para el logro de su crecimiento y desarrollo, la
afirmación y consolidación de la democracia, el ejercicio de la libertad, la
preservación y promoción de la cultura nacional y mundial.
Pertinencia social. El futuro, prestigio y éxito de toda universidad radica en su capacidad
de respuesta con los programas y proyectos a los retos del país y de la
sociedad del conocimiento.
Planificación. Toda universidad tiene el derecho de planificar su crecimiento y
desarrollo de manera horizontal, realista y con responsabilidad histórica,
según las exigencias, demandas o requerimientos de la institución y del país.
Pluralismo. La universidad está abierta a las diferentes filosofías y corrientes
del pensamiento universal, la ciencia, las artes, la tecnología, etc., con
libertad de cátedra, sin discriminación social, ética, religiosa o política ni
oposición por parte de las autoridades constituidas.
Solidaridad. La universidad convoca y fomenta la participación de la comunidad en
los actos de solidaridad humana.
Transparencia. La universidad se debe a la sociedad y como tal tiene un compromiso
histórico y social de ser transparente en sus actos, en la gestión, en el
manejo y en la operación de las actividades administrativas, académicas y
económico-financieras.
Unidad. La universidad es un todo unitario, que relaciona, interrelaciona e
integra de manera realista, armónica y coherente sus direcciones, facultades,
departamentos, escuelas profesionales y de post-grado, centros de extensión y
proyección social, centros de investigación, para un trabajo institucional y
académico eficaz, eficiente y efectivo.
Viabilidad. La universidad para alcanzar sus objetivos, fines y metas funda su quehacer
organizativo y académico en un conjunto de normas, orientaciones, planes, programas,
proyectos y fuentes financieras posibles de ser realizados.