REFLEXIONES
DE LOS ESTUDIANTES DE LA UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA
SOBRE ÉTICA PERIODÍSTICA
Escribe:
Eudoro Terrones Negrete
Desde que el ser humano se agrupó en sociedades,
no cabe duda que tuvo necesidad de contar con normas, disposiciones, reglas,
principios y valores éticos que le permitiera regular su conducta frente a los
demás miembros de la comunidad, con el fin de vivir bien y en armonía social,
haciendo uso de su libertad con responsabilidad.
El ser humano, desde que nace hasta que
muere, es un ser en permanente acción e interacción social; es un ser en
relación con-otro, un ser-por- otro y un ser-para-otro; es un ser que suscita y
soluciona deudas, dilemas, déficit y problemas éticos, dentro del contexto de
su antropine physei (naturaleza
humana) y ethos (naturaleza moral).
Dentro de este contexto hay una disciplina
de la filosofía que estudia la conducta moral, la conciencia moral y la
experiencia moral del hombre, se llama Ética. Esta disciplina es la moral pensada o la
teoría de la moral de las personas; es la ciencia del deber ser y del deber
hacer, es la ciencia del buen obrar y del buen vivir de las personas.
En la actual sociedad del conocimiento,
-con todos los goces de la educación, la cultura, la ciencia y la tecnología-,
las personas en general, entre ellos los periodistas o los comunicadores
sociales, requieren vivir en comunión axiológica, deontológica y ética, premunidos de conocimientos válidos y útiles
que les permitan transitar libremente, con credibilidad y seguridad, por las
anchas e interminables avenidas del bien común.
Por lo expuesto, interesa y preocupa a la
humanidad que las libertades de ser, de creer, de discernir, de pensar y de
expresarse libremente estén siendo desplazadas por las libertades de consumir,
de producir, de ganar dinero y más dinero, con el objeto de materializar la
vida humana, olvidando lo que el filósofo Kant escribió en su obra “La
fundamentación de la metafísica de las costumbres”: “El hombre como ser
racional existe como un fin en sí y no sólo como un medio que esta o aquella
voluntad pueda utilizar a su capricho”.
LA
ÉTICA, UNO DE LOS GRANDES RETOS DE LA PROFESIÓN PERIODÍSTICA
No debe olvidarse que la ética es uno de
los grandes retos o desafíos de la profesión periodística. El periodismo, sin
principios ni valores éticos resultaría siendo tierra de nadie, o morada de
plumíferos, sicofantes, mercenarios de la noticia, manipuladores de conciencias
y falseadores de la realidad.
Respecto a la ética debemos manifestar que
es la base fundamental y la razón de ser del buen periodismo y del buen
periodista; es la fuente primigenia y la mejor garantía para el ejercicio
correcto de la profesión en aras del interés social.
El grado de salud moral de los
profesionales de la información y la comunicación, de las instituciones y
sociedades democráticas se mide por el grado de sentido ético y de autonomía
individual (no ser ciudadano-vasallo, ni ciudadano-súbdito), por el nivel de
conciencia ética de sus derechos, por la capacidad suficiente y efectiva para
enfrentar la vida con una fuerza moral, y por la praxis ética en el cotidiano
vivir.
Es un lugar común el hecho de sostener que
el monopolio y el oligopolio de los medios de comunicación en el ámbito mundial
viene afectando de manera incontrolable el derecho de los destinatarios de la
información de contar con una información veraz, objetiva, responsable,
honesta, transparente y pluralista.
Consideramos que la vida democrática, las
libertades plenas, los derechos humanos fundamentales, el progreso de los
pueblos y la justicia social sólo serán posibles en la medida que la educación
mejore en todos sus niveles y modalidades, que los ciudadanos ejerciten sus
derechos civiles, políticos y sociales con ética
dialógica y responsabilidad comunitaria, y los periodistas y medios de
comunicación cumplan estrictamente y a plenitud sus funciones y rol social.
“Han mostrado muy bien Apel y Habermas, al
formular la Ética del discurso, que
todo mandato moral para que tenga verdadera validez práctica en la vida de los
miembros de una comunidad no debe dárselo cada uno por separado sino acordarlo
entre todos como fruto de un diálogo en el que participen en condiciones de
igualdad y expongan los argumentos o razones que la sustenten” refiere el
filósofo colombiano Camilo García Giraldo en su obra “Escritos sobre ética”
(2011).
Recordemos siempre que lo ético y lo moral
sólo corresponde a la persona humana. Con las expresiones de George H. Mead
diríamos: “Somos seres morales en cuanto seres sociales” y de Esperanza Guisán:
“El hombre es un animal moral no programado, al menos no totalmente programado,
condenado a elegir o, al menos, a tomar algunas decisiones”.
Así como la planta sólo crece vigorosa
cuando hunde fuertemente sus raíces en la tierra, así también el hombre sólo
crecerá moralmente cuando impregne de sentido ético y sentido social su
conducta cotidiana. La vida humana es base, no cúspide. El hombre es un fin y
no un medio. La base de la vida humana son los bienes morales o espirituales
fundamentalmente, y no sólo los bienes materiales o económicos.
CRISIS
DE VALORES Y HAMBRE DE ÉTICA
A diario se observa que principios
fundamentales, considerado antaño de carácter universal, han perdido vigencia
como sistema de valores, incidiendo negativamente en las diferentes actividades
que se desarrollan en la sociedad. Y es en el campo de las ciencias de la
comunicación, particularmente en el periodismo,
que se siente con mayor intensidad el vacío de una educación en valores.
Para todos resulta ser un lugar común el
afirmar que desde varias décadas estamos viviendo una profunda crisis de
valores, crisis de la cotidianidad y del desbarajuste moral, expresados en
lamentables actos de corrupción e inmoralidad. El uso de Internet está poniendo en jaque el inmanente
y natural derecho de las personas a su privacidad, a recibir información veraz,
responsable y digna; el hombre y su libertad están en peligro, con las
posibilidades de quedar a corto tiempo reducido a una burla grotesca o a un
rostro deshumanizado de por vida.
La crisis de valores es una realidad.
Impera por doquier: Usura, soborno, “mordidas”, chantaje, malversación de
fondos, engaño, abuso de autoridades, evasión tributaria, declaraciones juradas
falsas, sueldos elevados paras un puñado de funcionarios en un país pobre,
nepotismo en empresas públicas y privadas, transfuguismo político-partidario,
lavado de activos,, interceptación telefónica desde el poder con fines de
desprestigio político a sectores de la oposición, manipulación de conciencias,
de informaciones y de opiniones, etc., etc., mientras millones de niños mueren
de hambre.
Actualmente el mundo se ha unificado tanto
y sus partes están interrelacionadas (globalización), habiendo roto fronteras
espaciales, temporales y territoriales, que los problemas morales pierden su
carácter localista y se universalizan. Al respecto sobran ejemplos. “La
apartheid en Sudáfrica se convierte en cuestión moral para todo el mundo, lo
mismo que la segregación negra en los Estados Unidos o la lucha de liberación
de los campesinos de Vietnam del Sur. Lo mismo vale para la libertad de
pensamiento y de palabra, para la libertad de información y de uso de los
medios de comunicación en todo el mundo. La postura de la Iglesia católica
sobre el control de la natalidad y el sexo y la violencia de las películas de Hollywood se convierten análogamente en problemas éticos de interés universal”
señala Howard Selsam en su obra “Ética y progreso”.
Se afirma categóricamente que en los
países de América Latina el 58 por ciento de los niños viven por debajo de la
línea de pobreza, el 33 por ciento de los menores de dos años están desnutridos
y qué decir de los niños que viven en las calles, en total desamparo, sin
padres ni madres ni Estado que los protejan. Resulta que América Latina es la
región más desigual e injusta de todo el planeta tierra.
“Frente a los agudos problemas de pobreza
y desigualdad que presenta América Latina,- refiere Bernardo Kliksberg-,
valores éticos básicos tales como la responsabilidad de los unos por los otros,
la sensibilidad frente a la pobreza, el respeto profundo a la dignidad del
pobre, la sensación de urgencia frente a los daños irreversibles que causa la
pobreza y ayudar al otro de manera tal que no necesite más ayuda, deberían
orientar el diseño de políticas y los esfuerzos por el desarrollo”.
Frente a la crisis moral actual la
comunidad académica universitaria de Perú y América Latina fundamentalmente
exige un replanteo y una redefinición axiológica en todos los niveles y
moralidades educativas y a través de los medios de comunicación. La niñez y la
juventud no quieren creer en una sociedad global que crea culpa, que
materializa la vida humana, que produce malos ejemplos, que genera actos de
impunidad e inmunidad en amplios sectores de la población y de los poderes del
Estado.. Se tolera el favoritismo o se encubre irregularidades por mantenerse
en el puesto de trabajo. Hay el afán de ganar más dinero a costa del menor
esfuerzo posible y por cualquier medio.
“Los escándalos por falta de ética
empresarial como los de Enron, Worldcom o Arthur Andersen ha causado a la
economía más daño que el atentado del 11 de septiembre”, dijo a EFE la filósofa
Adela Cortina, dentro del marco del I Congreso Iberoameriano de Ética y
Filosofía Política.
Para vivir bien es necesario saber elegir
bien. Elegir bien es procurar todo aquello que es adecuado, bueno, honesto,
digno y justo. La vida es un afanarse constante por querer ser de una manera
correcta, con clara conciencia de la auténtica responsabilidad en su cuádruple
dimensión: responsabilidad social, política, jurídica y ética; conciencia plena
de las posibilidades de llegar a ser, para poner en práctica el deber ser y el
deber hacer bien de las cosas, con el fin de alcanzar lo que uno se propone ser
en el transcurso de su existencia.
Por eso que consideramos importante y
trascendente para los periodistas el ejercicio de la profesión sobre la base de
sólidos principios y valores éticos. Un conocimiento razonado de la moral ilustraría sus conciencias, facilitaría la
práctica del deber profesional y resultaría siendo un auxiliar poderoso en el
manejo de sus conductas. Les facilitaría así disipar ilusiones, sofismas,
dilemas éticos, prejuicios, animadversiones, bajas pasiones, presiones y
egoísmos. Si la conciencia de los periodistas entra en contacto con los valores
éticos, los actos de los periodistas se efectuarían mediante el dictado de sus propias
conciencias y estarían orientados a escoger el camino del bien común, por el
bien común y para el bien común. Con las palabras de José Ingenieros diríamos:
“El hombre que atesora las fuerzas morales adquiere valor, recto sentimiento
del deber que condiciona su dignidad. Piensa como debe, dice como siente, obra
como quiere…Acepta las responsabilidades de sus propios yerros y rehúsa su
complicidad a los errores ajenos”.
Si Enrique V. Iglesias, en su condición de
presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, dijo alguna vez que “¡Hay hambre de ética en el mundo!”, por
nuestra parte agregamos que hay también necesidad de trabajo digno con salario
justo, necesidad de mayores grados de
libertad y de justicia social, de explotación y distribución equitativa
de la riqueza mundial, de globalización
económica pero con rostro humano.
“El mundo futuro será ético y espiritual o
no será”, es una profecía que se atribuye al escritor André Malraux.
REFLEXIONES
DE LOS ESTUDIANTES BAUSATINOS SOBRE ÉTICA PERIODÍSTICA
Preocupados por el problema que origina la
falta de ética en el periodismo, los
estudiantes del noveno ciclo, sección B, decidieron publicar en el mes de junio
del año 2015 los artículos que escribieron como tarea académica en la
asignatura de “Ética Periodística”, asignatura que tuve el honor de enseñar en
la Universidad Jaime Bausate y Meza. Y lo hicieron bajo el título: REFLEXIONES DE LOS ESTUDIANTES SOBRE ÉTICA
PERIODÍSTICA. Varios ejemplares de esta obra fueron entregadas a la
biblioteca de la Universidad.
La obra está orientada a suministrar la
información necesaria para el logro de una conducta moral del periodista con
compromiso ético en sus pensamientos y acciones, a fin de escoger la vida práctica virtuosa y vivir el
periodismo desde una experiencia axiológica, ética y deontológica. El actuar
ético supone hacer lo que es moralmente bueno, digno, honesto, responsable y
justo para uno y los demás. La conciencia moral de la sociedad, de los
periodistas y los medios puede recusar las malas prácticas en procura de la
calidad de vida de toda la población, con un mínimo de normas morales
compartidas por los ciudadanos y la ética dialógico-comunicativa de la
racionalidad que conduzca al bien pensar para el vivir bien.
Esta obra, escrita en su integridad por
los estudiantes de periodismo, del noveno ciclo, sección B, de la asignatura Ética Periodística, de la Escuela
Profesional de Periodismo/Facultad de Ciencias de la Comunicación Social, de la
Universidad Jaime Bausate y Meza, contiene temas de palpitante actualidad en la
sociedad del conocimiento, que pueden ser leídos de principio a fin con el
mismo entusiasmo e interés, a sabiendas que los seres humanos somos seres
imperfectos, pero, a la vez, perfectibles si demostramos tener amor por el
estudio, espíritu de superación y de perfeccionamiento sobre la base del
cultivo de las diversas ciencias y la práctica de los principios y valores
éticos.
Los
títulos de los artículos fueron extraídos del sílabo de la asignatura de Ética Periodística por cada uno de
los estudiantes, en función a sus preferencias académicas y dominio del tema.
En mi condición de profesor de la asignatura me permito recomendar su lectura
fundamentalmente a los estudiantes de las facultades de ciencias de la
comunicación de las universidades del país y al público en general, lectura que
constituirá un efectivo estímulo al esfuerzo realizado por cada uno de los
estudiantes y su permanente superación profesional.
En
las líneas que siguen se inscriben los autores de esta obra con el adelanto de
un párrafo significativo de sus pensamientos sobre la ética periodística.
KEILA ELENA CAICEDO DE LA CRUZ:
“Si
se va emitir una mala información o de manera incompleta, es mejor no decirla.
Es mejor callar antes de deformar y desinformar a la sociedad…Es gracias a la
ética que los periodistas podemos regular nuestra labor y ser mejores
profesionales”.
VÍCTOR
HUGO CRIADO ZÚÑIGA:
“Como
se ve, el derecho a la rectificación ahora significa una gran herramienta para
que no se vulnere los derechos de los ciudadanos ni se dañe su imagen y
reputación mediante contenidos difundidos en los medios de comunicación”.
JUAN
PABLO SÁNCHEZ PÉREZ:
“El tema del
interés social contra el interés empresarial en los medios de comunicación
sigue siendo aquella asignatura pendiente
que no hemos podido solucionar. La idea soñadora de esperar que los
medios se autorregulen, busquen abarcar temas de cultura o que abran sus
espacios para que los ciudadanos puedan expresar sus opiniones sigue siendo
eso, una idea soñadora. El dinero de
estos malos empresarios que lucra con un derecho humano sigue teniendo más peso
que los valores o el sentimiento de apoyo al crecimiento de la sociedad”.
JORDÁN ANÍBAL PONCE CANCINO:
“Un periodismo que basa su calidad en la medición del rating, en las
ventas por tiraje y que se subordina a las decisiones de los dueños del medio y
autoridades gubernamentales, es un periodismo que no genera información de
valor, que emite contenido superfluo, que no demanda mayor análisis en las
noticias y que pierde credibilidad ante sus lectores, televidentes,
radioescuchas y usuarios”.
FRESIA FLOR FLORES HERRERA:
“Propiciar
una cultura informativa con veracidad y responsabilidad, para que prevalezca la
verdad, debe ser la misión de los periodistas y medios de comunicación, alejados
de todo intento de manipulación de los contenidos”.
NANCY ANTONIA GUTIÉRREZ MESÍA:
“El
periodista debe saber que tiene la obligación de tratar la información con
extrema confidencialidad, todo esto por una cuestión de garantía, seguridad y
protección a la fuente informante”.
JUNIOR RODOLFO GOYZUETA PLASENCIA:
“La
ética no debe concebirse como un interés personal sino como una necesidad
colectiva para el desenvolvimiento armónico de la sociedad democrática, ética y
civilizada, con plenos Derechos Humanos”.
GREYSI CRUZ CRUZ:
“La
prensa y la ética parecen haberse divorciado y la credibilidad es una
característica que muy pocos presentan en la profesión”.
ANTHONY ANDRE CABALLERO ÁVILA:
“La ética
periodística contribuye a tener una sociedad mejor informada para que tenga una
mejor opinión sobre lo que ocurre en el día a día en la sociedad y pueda
contribuir con fundamento y conocimiento de causa a la solución de los
problemas que le interesan y preocupan. Periodismo ético sí, sociedad ética
también”.
YNGRID LUCERO CORRALES RIVAS:
“Entendemos
que la ética en la radio debemos aplicarla en su extensión e inclusive a través
de las nuevas tecnologías que nos da la Internet donde no existen entes
reguladores que controlen los contenidos, donde tenemos más libertad para
expresarnos y por ende tenemos mucho más obligación de ser nosotros nuestros
propios reguladores de manera responsable. Es cierto que se necesita y se deben
generar nuevos códigos de ética para esta nueva era multimedia, pero sí la
ética debe permanecer por siempre”.
PAOLA ROSA ASTUCURI ALARCÓN:
“Insisto
que la ciberpornografía es algo que necesita la atención de todos, porque si no
cesa o disminuye este problema en un par de décadas, ya no existirán ni tendrán
el mismo significado ético y moral los valores del respeto, la dignidad humana
o la autoestima”.
EDUARDO ALEJANDRO SOSA LLONTOP:
“Los
periodistas deportivos contraen gran responsabilidad a la hora de informar, ya
que son los más seguidos y ejercen gran influencia en los hábitos de conducta y
modos de expresión de la ciudadanía. Por eso, bale la pena detenerse en las
funciones que desempeña el periodismo deportivo como uno de los grandes
vehículos actuales de la ética, entendida ésta como un compromiso del
profesional con la sociedad a la que se dirige, con la que se identifica y a la
que presta un servicio público”.
LUIS EDUARDO ZEGARRA ZAVALETA:
“Si
antiguamente la prioridad del periodismo escrito había sido ser la conquista de
la libertad de prensa o adquirir una tecnología suficiente para responder a las
exigencias de una información adecuada a nuestra sociedad, hoy ocupa el puesto
prioritario la preocupación ética”.
JUAN ALBERTO FALCÓN VELORIO:
“Los
periodistas en general y en especial los de investigación, manejan una valiosa
información de todo tipo: general, especializada, confidencial y privilegiada,
que son muy requeridos por los grupos de poder económico y políticos. Hechos
sucedidos al margen de la ley y que son guardados en los cajones de oficinas y
otras desaparecidas a la fuerza, son casos prioritarios que todo periodista con
buen olfato debe investigar en procura del interés colectivo”.
MAYRA ALEJANDRA MALÁSQUEZ HUAPAYA:
“Si
en este momento la prensa nacional no cumple con la objetividad que el
periodismo ético requiere, es deber de nosotros los estudiantes de periodismo,
futuros profesionales de la comunicación, limpiar la mala imagen que se tiene
sobre la profesión y los periodistas peruanos”.
WILDER AMÓS PANTOJA LÓPEZ:
“Muchos
de los espacios radiales representan una amenaza para la pérdida de valores ya
que se extralimitan en el mal uso del lenguaje y en el tratamiento de temas
serios y delicados como el sexual, teniendo en cuenta que no puede controlar
que menores de edad escuchen este tipo de programación”.
GUILLERMO
JEAN MARCELL LORO LIZZETTI:
“Nosotros
construimos el honor en cada día de nuestras vidas y con los valores que
adquirimos en el transcurso del tiempo. Y no es justo que nos escudemos en
nuestra libertad de expresión para destruirla en un abrir y cerrar de ojos”.
VANESSA ANDREA BARREDA MONTOYA:
“Son
métodos antiéticos que utilizan algunos medios de comunicación: el uso de cámaras
escondidas, donde se graba a la persona informante sin que esté enterada de que
la están filmando y sin su consentimiento; la transmisión de noticias sin hacer
la pesquisa respectiva; la utilización de calificativos despectivos sin haber
comprobado que lo que se especula es cierto; presentar noticias
sensacionalistas; y publicar fotos trucadas, entre otros”.
MARTHA
AUGUSTA RUIZ BALAREZO:
“Los grandes
dueños de las distintas empresas de comunicación no son periodistas, por ende
exigen de los profesionales la venta de las noticias, el sesgo de la
información, el sensacionalismo, la manipulación informativa, para su
conveniencia de rentabilidad empresarial, que no es el interés de la
colectividad. Esto deriva en una mala reputación de los periodistas y los
medios, cuando se acepta la inmoralidad, la frivolidad, que vemos en la
televisión y prensa escrita”.
MARÍA
MILAGRITOS SIFUENTES VÁSQUEZ:
“Con el pasar de
los años, la ética se vuelve parte fundamental de la vida de las personas,
tanto de los profesionales y periodistas como de los que no lo son. Creemos que
todas las personas deberían cultivar y practicar valores desde pequeños para
que las futuras generaciones no crezcan en una sociedad infestada de personas
que no los tengan”.
GLADYS ISABEL
ESPINOZA RIVAS:
“En la actualidad,
la televisión tiene mucho poder. Y la cámara oculta es un elemento esencial,
aunque utilizada sin ética es peligrosa, porque es una justicia sin apelación.
El espectador lo ve, lo condena y lo toma como cosa juzgada. Se emplea, como un
medio para develar unos hechos ocultos o buscar unas pruebas que confirmen una
investigación periodística. En otras ocasiones, funciona como un cebo que
engancha a la audiencia. El Periodismo, debe indagar en fuentes, no caer en el
espionaje. Es preferible tener paciencia y solicitar la información completa
antes de estar usando métodos que no están apegados a la ética periodística”.
MÓNICA
MARGARITA FUERTES ALTAMIRANO:
“Los seres humanos
aprendemos y así como aprendemos, también podemos desaprender los malos
hábitos. Por ejemplo podemos promover a través de la comunicación entre
familiares, amistades, conocidos y en las redes sociales a utilizar palabras
adecuadas para expresarnos sobre un tema en particular, sin lastimar
susceptibilidades ni herir sentimientos ajenos. Así la ética que tenemos se
verá reflejada en los demás. Solo respetándonos a nosotros mismos, seremos
capaces de respetar a los demás”.
MARÍA
LUISA SAAVEDRA NÚÑEZ:
“¿Son realmente
las redes sociales medios de expresión masiva? Sí y no. La plataforma web es
tan amplia que está lista y preparada para el tráfico de información masiva,
sin embargo la falta de comportamiento ético de sus participantes opaca esta
manera de difusión. El cuidado de nuestra privacidad, el evitar compartir
información personal que pueda ser utilizada en nuestra contra, así como
respetar los datos personales de otros usuarios contribuye a la armonía en
estos medios en línea”.
SUSANA
ARACELI VALDIVIA DOMÍNGUEZ:
“Sin embargo, hoy
en día los medios impresos presentan una excesiva difusión de imágenes producto
de la tecnología fotográfica digital, que ha provocado que el lector se sature
de información visual, la cual no puede ser entendida ya que no está generando
ningún impacto, restándole valor a la importancia del fotoperiodismo, pues no
se está difundiendo sus cualidades y mucho menos se está incentivando “la
reflexión y el estudio de la foto como fenómeno sociopolítico de comunicación”.
EVELYN MIRELLA UBILLUS RUIZ:
“Frente a esto, el
Colegio de Periodistas intentó establecer mecanismos de autorregulación en
nuestro país, en el caso de Puno, por ejemplo se logró hacer un pacto ético
entre los diarios y canales de televisión en la zona construyendo su propio
código de ética debido a que los pobladores consideran que la educación es muy
baja en esa región y necesitan apoyo educativo con programas y noticieros que
culturicen al público”.
MARIBEL
SHIRLEY CARRASCO LLAVILLA:
“Hay
preocupación permanente de los medios por contar con muchos lectores o gran
sintonía que les permita autofinanciarse o ganar influencia y respeto. Para
lograrlo tienen que practicar un periodismo de gran impacto e interés, pero,
sobre todo, que tenga credibilidad. Es decir, que todo lo que informen
corresponda a la verdad de los hechos. Y, cuando se equivoquen, tener la
entereza de reconocer el error y pedir las disculpas del caso. La credibilidad
se logra cuando los medios respetan los principios éticos periodísticos”.
ANGIE DE GLADYS GÓMEZ ACOSTA:
“Y así para cada persona, grupo, forma de pensar, sexo, o
edad, siempre encontraremos un estereotipo televisivo para ellos. Un buen
periodista no puede estar informando estos sucesos, si estudias para realizar
un buen periodismo, ejércelo. La televisión es un medio de comunicación
completo que logra llegar casi a todo el
mundo que lo ve, con mayor razón para emitir programas con sólidos principios y
valores éticos en bien de la sociedad”.
PEDRO WALTER BUSTAMANTE
CRUCES:
“Finalmente
podemos coincidir en manifestar que la opinión pública es manipulada por los medios de comunicación,
por múltiples motivos e intereses. Pero para que tal cosa no ocurra es
necesario contar con mejores periodistas y medios formados en la escuela de
vida con sólidos valores morales”.
KATIUSKA
ESTHEFANIE ALCALÁ LUJÁN:
“Para ejercer el
periodismo, ante todo, hay que ser buenos seres humanos y ciudadanos, no solo
serlo sino parecerlo. Pero no dejan de existir las malas personas con
antivalores, que en la mayoría de los casos son extorsionadores, chantajistas,
delincuentes a sueldo que viven
sembrando discordia, vendiendo mentiras y alimentándose de la carroña a cambio
de unos miles de soles y que, definitivamente, no pueden llegar a ser jamás
buenos comunicadores sociales”.
JOHELIA
ENCISO GUTIÉRREZ:
“En un estado
totalitario, con medios digitados desde palacio de gobierno, con periodistas
sin independencia de juicio, con trabajadores, empleados y funcionarios que
piensan con un solo lado del cerebro, con políticos que tienen
por finalidad apoyarse en la demagogia, el engaño y en
acciones represivas, sin la mínima posibilidad de ejercitar el derecho de la
crítica y de luchar por que salga la verdad a flote, el futuro de los
ciudadanos está en permanente peligro y no hay esperanza para un futuro mejor. En
un estado totalitario los medios de comunicación constituyen la voz oficial del
gobernante. Sólo publican lo que reciben de la oficina central de informaciones
del gobierno, sin lugar a comentario alguno”.
MARTHA
PRISCILLA VALENCIA VALLES:
“Hoy en día la
ética del periodismo debe tener en cuenta el papel de la audiencia, el impacto
de la comunidad y el potencial de la tecnología de manera más completa. La Ética orienta y guía al periodista a determinar que es
correcto y que no es correcto, qué es lo permitido y qué es lo prohibido, qué debe
hacer y qué no debe hacer, tras la búsqueda de la esencia de la moralidad y del
camino correcto, digno y justo a seguir en el ejercicio de la profesión”.
SEBASTIÁN SOTO RUIZ:
“Creo que el fin
de todo periodista es aproximarse lo más que pueda a la verdad informativa.
Tratar de difundir el hecho de forma que esté menos contaminado de prejuicios,
ideologías u opiniones. Y una manera de estar más próximo a ser objetivo es
siendo plural e imparcial, ya que si el hecho es comentado por distintas
fuentes, que estén a favor o en contra, cada uno con su verdad, esto permitirá
a las personas sacar sus propias conclusiones y a los encargados de la ley,
cumplir su función sin ninguna presión mediática, solo basándose en la
información de los hechos”.
JANET
MELCHORA REGALADO MELLADO:
“Son
recomendaciones válidas para todo periodista ético: el respecto a la verdad;
estar abierto a la investigación de los hechos; perseguir la objetividad por
todos los medios posibles; contrastar los datos con varias fuentes
periodísticas; diferenciar con claridad entre información y opinión; enfrentar
a las corrientes opositoras con la verdad en la información, el comentario y la
crítica”.
CINTHIA
GALVÁN JAMANCA:
“Finalmente, es
necesaria una reflexión sobre la situación actual del periodismo peruano. Se
debe recuperar la confianza y la valoración e la noticia, la buena imagen que
siempre ha tenido la profesión, la credibilidad plena. El país y la sociedad
requieren de periodistas ejemplares. Como dijo Bernardo Díaz Nosty, director de
la cátedra UNESCO de la UMA, “La clave será tener una mayor cercanía a la
sociedad y una cierta distancia del poder. El periodismo se regeneraría así y
conseguiría de nuevo la credibilidad entre sus audiencias”.
JENNIFER
ESTHER CHAMOLI SÁNCHEZ:
“La mejor manera
de superar el periodismo sensacionalista es no consumiéndolo, de nada vale que
lo critiquemos, si cuando nos sentamos frente a nuestro televisor son estas
noticias las que más consumimos. Cada periodista y cada persona son libres de
escoger que ver, leer u oír, pero también son lo suficientemente inteligentes
para distinguir entre el bien y el mal”.