COMENTARIO OBRA 10:
UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA / TESTIMONIO DE UN PERIODISTA
De izquierda a derecha: Mario Rubén Gonzales Ríos, Eudoro Terrones Negrete y Danilo Sánchez Lihón, en el auditorio de la Universidad Jaime Bausate y Meza.
Escribe:
Danilo Sánchez Lihón[1]
«Los hombres que luchan un día
son buenos,
los que luchan un año son
mejores;
pero quienes luchan toda
la vida ésos son los imprescindibles».
Bertolt Brecht.
1. MÉRITOS GANADOS
La antigua Escuela de Periodismo, hoy Universidad
Jaime Bausate y Meza, suma a su oficialización como universidad en noviembre
del año 2008, la buena nueva de tener en el mármol de las letras de un libro
notable, como es ”Universidad Jaime Bausate y Meza, testimonio de un
periodista” del Dr. Eudoro Terrones Negrete, el mármol virtual que
es más noble e imborrable que el mármol mismo. Es la historia contada de cómo
fue su trayectoria, para ser universidad, de cómo es ella misma, del sentido
axiológico de su presencia en nuestro país, del horizonte de su devenir, como
sobre la deontología de su ser. Todos estos hechos se plasman en el libro
“Universidad Jaime Bausate y Meza, testimonio de un periodista”, del Dr. Eudoro
Terrones Negrete, que ahora se presenta y celebramos con júbilo.
Pero se tiene, además, con este libro, la crónica
tallada, hora tras hora, de cómo fue su conversión de Escuela en Universidad.
Siendo así, ¿no es éste, acaso, un hecho excepcional, sobresaliente y lleno de
trascendencia? ¿No es éste, aparte, un privilegio? ¿No es una suerte más que se
agrega al otro fasto de hace apenas un año, de ser ya una universidad?
Y ello no como una pretensión sino como un mérito
ganado, tal y como lo dice el texto mismo de su conversión: «cambia de
denominación», nada más. No se exige nada aparte, porque en todo el proceso de
esta gestión se demostró y verificó fehacientemente que en todas las áreas y
exigencias de calidad se era ya desde antes una verdadera y auténtica
universidad.
2. OBRA ABIERTA
Pocas universidades tienen el privilegio de recoger
paso a paso, día a día y hora a hora, los hechos que son hitos en su
trayectoria, en su decurso y devenir.
Y más aún: en obras de quienes son sus
protagonistas, sus actores, sus gestores y testigos directos de estos logros,
asunto que es digno del mayor relieve y ponderación.
¡Cómo quisiéramos que las instituciones en general
tuvieran estos cronistas directos, que a su vez fueran los personajes más
relevantes de la escena y de su accionar! ¡Que los organismos tuvieran sus
veedores y notarios autorizados! ¡Y fueran quienes encarnaran
incluso la representación fiel de la causa que asumen ante el colectivo que espera
afuera en las veredas o en la plaza pública!, comprometidos, honorables y
fidedignos con la causa que defienden. ¡Y eso es don Eudoro con relación a esta
alta casa de estudios!
La historia entonces sería más clara, tendría menos
errores, contarían con más elementos de juicio para conocer aquello que vale
conocer, y todo ello para decidir con más acierto. Y para ser mejores nosotros
mismos.
En esto debemos sentirnos orgullosos y agradecidos
por la obra que hoy se presenta, porque ella nos respalda y representa. Y nos
retrata a todos y a cada uno en particular en algún ángulo del escenario. Obra
que está abierta para que todos busquemos y encontremos nuestro lugar en ella,
piedra de ara o altar adonde podemos entrar para saber quiénes somos y lo que
nos toca hacer para dignificarnos nosotros mismos en el rol que venimos
cumpliendo.
3. ENTRAÑABLE Y ALTO CARIÑO
En el libro del Dr. Eudoro Terrones Negrete,
«Universidad Jaime Bausate y Meza, testimonio de un periodista» encontraremos
cuáles son los fundamentos legales y el proceso que se ha seguido para hacer de
esta casa de estudios una universidad, jerarquía que la alcanzó en la práctica
y que la parte formal y jurídica solamente la ha consagrado.
Tal y como lo tipificó el dictamen del Congreso de
la República, al decir que únicamente cambia de denominación de Escuela a
Universidad, queriendo decir así que todo en ella está bien y que con esta
nueva jerarquía se abra a un horizonte mucho más promisorio y esperanzador.
Lo que hizo la ley es ratificar y consolidar un
trabajo paciente de largos años, yendo a la esencia y dejando entendido y
sentado que la estructura, la organización, el sentido y la calidad de esta
casa están bien. ¿Y esto, entre otros factores, gracias a qué o a quién? Sin
reticencias me cabe decirlo: Gracias a las autoridades que ha tenido y tiene
esta institución tutelar del país, y entre ellas de manera destacada del Dr.
Eudoro Terrones Negrete.
Permítanme expresar que desde que ingresé a
trabajar en esta morada de saber, me sorprendió, encantó y maravilló,
llenándome de una honda simpatía, reconocer en el Dr. Eudoro Terrones Negrete
el gran cariño, el entrañable y alto cariño, que él tiene, tenía y tendrá por
siempre por esta institución educativa, que a todos cada día se nos hace
evidente y nos consta.
4. ESCRITO DESDE DENTRO
Ahora bien, éste es un cariño que se traduce en
obras y acciones concretas. Acciones para ser mejores, más eficaces, plenos de
compromiso y excelencia. Porque él es quien siempre está apuntando a lo
esencial y valioso. Cariño de quien quiere lo mejor para sí y para los
demás; y entonces es dedicado, exigente, y escrupuloso sobre
todo en la formación de jóvenes periodistas, íntegros y cabales.
¡Es campana lanzada a lo alto y a lo lejos! De allí
que en esta obra esté todo lo que es importante conocer acerca de la
Universidad Jaime Bausate y Meza, porque es un texto escrito desde dentro,
desde la acción misma y con las mejores aspiraciones. Y por un autor, quien es
además un personaje autorizado y protagónico de estos hechos.
Por eso, es una suerte tener a un cronista de este
espacio y de esta época. Y de la magnitud que él la tiene. A quien no le puede
fallar un solo dato porque él lo ha vivido y es más: lo ha producido. Y que
todo lo que está aquí registrado proviene del defensor, del abogado. Y del
numen y del predicador de toda esta epopeya.
Con los 22 documentos que aquí se consignan se
ayudó de manera decisiva a convertir la antigua Escuela de Periodismo en
Universidad Jaime Bausate y Meza. No es que estos textos se hayan hecho después
como un recuento, se hicieron en el momento de la acción. Pero es más, se
hicieron antes, como parte de la campaña para convertir la Escuela en
Universidad. Entonces: ¿No es un privilegio conocerlos y tenerlos para siempre
en nuestras manos, convertidos en libro?
5. Y CON ELLO EL FUTURO
Constatamos así un hecho singular y paradigmático,
cuál es: que el logro para ser universidad se ha realizado también desde el
periodismo. Y se nos demuestra algo clave: que el periodismo es a la vez
gestión y es acción a favor de algo.
Porque los artículos que aquí se presentan no son
después del hecho, aquello que se haya escrito como un recuento o una
evocación. Fueron más bien elaborados antes de los hechos.
Fueron escritos para desencadenar los hechos que
se prevén o se anuncian, con pertinencia, con oportunidad, con
sentido institucional, social, ético, político. Y profético.
Entonces, estamos ante algo absolutamente
ejemplificador. Nos enseña algo más a favor del quehacer de las comunicaciones
y del periodismo en el mundo actual. Y mucho más si todo ello se concreta ahora
en una obra que puede estar en manos de los jóvenes que se forman en esta casa.
Muy buena lección y muy buena moral es ésta y mucho
más que ella se haya plasmado en un organismo vivo y proyectivo como es este
establecimiento. Porque todo este acontecimiento, toda esta naturaleza y
ubicación, nos plantearía una reflexión del periodismo como mucho más que
información, como algo mucho más prometedor y con visión de futuro.
Es alzar el rostro y la mirada desde el periodismo
hacia el mañana. Es la opción del periodismo que se resumiría así: lo que se
escribe y hace está condicionando el hecho del futuro y con ello la posibilidad
de forjar un mundo mejor.
6. DIADEMA EN LA FRENTE
Por eso, hay que leer esta obra con esa óptica. En
la perspectiva de que en aquellos momentos que los textos nos presentan la
realidad todavía no era, estaba por hacerse, recién se desenvolvía y devenía en
posible.
Hay que sentir más bien en estos escritos el fragor
del esfuerzo, el fragor de los sables que se entrecruzan. Y de los tambores que
con su redoble rubrican batallas ganadas, que hacían prever el triunfo
definitivo, el mismo que se produjo y se ofreció óptimo y pródigo. Y somos
nosotros quienes ahora lo viven y se benefician con ello.
Por eso es una suerte y una enorme prebenda tener a
un cronista y a un defensor de toda esta gesta y de tamaña categoría. Es una
suerte leer lo que se produjo al interior de los organismos involucrados en
aquel momento. Es una suerte tener la experiencia de cómo se obtienen triunfos
en función de los grandes objetivos que alguien se había propuesto alcanzar en
determinado momento.
Porque hay en toda la documentación que aquí se
presenta una opción y una égida, cual es la visión de excelencia: el
engrandecimiento de algo, la consagración a las grandes tareas y el cómo se da
cumplimiento a los más caros ideales.
Y eso se ha logrado en algo que nos beneficia a
todos: se ha logrado coronar a la universidad, a un año de su
institucionalización, con un nuevo título, envestirla de una diadema
en la frente, cual es la crónica de su fundación.
7. VISIÓN EN EL PORVENIR
Pero el tema de esta obra con ser central en
relación a la ahora Universidad Jaime Bausate y Meza, rebasa y es una reflexión
sobre asuntos concernientes a lo que es una universidad como realidad, concepto
y entelequia.
Porque hay en ella reflexiones sobre la situación,
el desarrollo, la consolidación de las universidades y el importante papel que
ellas deben desempeñar en nuestra sociedad.
Hay un anhelo, un idealismo de cómo deben ser ellas
y hasta una utopía intrínseca a su índole y a su misión.
Así como en las interlíneas de esta obra resalta la
Universidad Jaime Bausate y Meza como un dechado de ecuanimidad, de prestancia
y distinción en todo: nunca se la vio envuelta en un escándalo, ni en una
ilegalidad, ni en dimes y diretes, y eso que parecería normal más bien es
excepción a la regla.
Siempre esta institución fue eminente, sobria y
eficaz. Sin concesiones ni debilidades, sin genuflexiones al poder, siguiendo
siempre una línea intachable de conducta, de profesionalismo y de fe en nuestro
porvenir.
Lidera la enseñanza del periodismo en el Perú y
América Latina, porque tiene enjundia y tradición, coraje para asumir
innovaciones y la visión de porvenir.
Porque en ella los estudiantes ponen el talento y
la institución la experiencia y la emoción por el futuro. Porque en ella están
los mejores profesores y estudiantes, y porque a un bausatino sólo lo supera
otro bausatino.
8. SE CULTIVA LA EXCELENCIA
Y todo ello, creo yo, por un gran detalle: porque
es una universidad del gremio de periodistas del Perú.
¿Qué más autenticidad? ¿Qué más legitimidad y
raigambre?
Pertenece esta casa a un colectivo, a una
Asociación de Periodistas. En el fondo, no es una institución privada sino
pública desde que pertenece a un gremio.
Y porque tiene una columna vertebral en Eudoro
Terrones Negrete, un paradigma de hombre pertinaz, consecuente e
inquebrantable.
Y este libro, que a su vez es un cuaderno de
bitácora, es su fiel reflejo.
Pugna constantemente por su excelencia, su
pulcritud, su formalidad y su estatus. Hay un afán por ser sobresaliente,
dentro de lo justo y para mejor servir a la comunidad a la cual se debe.
Porque es exigente. Ahonda en los temas, cultiva en
los alumnos la prestancia, como el cumplimiento de sus tareas y
responsabilidades.
Es una persona juiciosa, que enlaza, que cultiva. Y
su mirada es vasta, porque sabe soñar. Y esta Universidad en gran medida es su
sueño. Sino veamos: Ya en el año 1998, para ser más precisos un 15 de enero, él
presentaba un trabajo de investigación para su doctorado y cuyo tema era:
«Proyecto curricular de la carrera profesional de Periodismo de la Universidad
Jaime Bausate y Meza» que en gran medida ahora se aplica y realiza en nuestra
casa.
9. TEMA QUE SE ELUDE
El tema fuerte que como docente Eudoro Terrones
Negrete desarrolla es el de la ética, el del comportamiento y la conducta en
los medios de prensa. Es el curso que dicta. Es el tema de su conversación
diaria en los pasadizos. Es su apostolado en los medios de comunicación.
Qué importante que un directivo de una institución
tan significativa e importante del ámbito de la comunicación, su tema sea tal;
que éste sea su predicamento, que este campo, la ética, sea la misión de su
vida. Porque él está insistiendo siempre en ello, incluso a través de obras
escritas como es su libro publicado: «La ética en los multimedios de
comunicación».
Porque lo que ocurre es lo contrario, cuál es que
de manera declarada o subrepticia se opte por callar este tema, por ocultarlo,
por no decir nada ni siquiera esta boca es mía cuando de él se trata. Porque
este es asunto vedado, irritante, que se lo elude; mucho más en el campo de las
comunicaciones.
Porque se piensa que lo que tiene que dominar
realistamente es la ley del mercado, donde todo se compra y se vende incluida
entre aquellas otras cosas la conciencia; que hay que seguir la corriente del
mercantilismo, hecho que constituye la inescrupulosidad como doctrina.
10. PROFESIÓN
DE FE
En este aspecto, en la Universidad Jaime Bausate y
Meza otro es el panorama y completamente auspicioso.
Aquí tenemos un director, una columna vertebral de
la casa, una viga maestra del edificio cuya ley, centro y clave es la ética en
todo aspecto, incluido el periodismo.
Qué importante asunto este, ¿no es cierto?
Porque es lo básico en estos momentos para formar a
un comunicador si es que queremos que el periodismo contribuya a darle dignidad
a nuestro pueblo.
¿No es lo mejor para instituciones como una universidad
dedicada a formar periodistas, que uno de sus directivos levante e ice esta
bandera inapagable?
¿El que uno de sus directivos y baluartes tenga
este eje como su compromiso y misión?
Porque, ¿es usual que un directivo de una empresa
que tiene que competir en el mercado tenga a la ética como su profesión de fe y
su praxis de vida?
Lo usual es que este tema se lo esconda., que
asuntos como éste se lo calle a cuatro voces.
11. EN BIEN DE LOS DEMÁS
De allí que se respire integridad moral en esta
casa, confianza y fe en los retos por asumir. Mucho de ello deviene de
directivos como Eudoro Terrones Negrete, autor de este libro.
Porque él afirma su convicción en el bien, porque
él cree firmemente en lo que hace. Es persuasivo e íntegro. Porque él tiene una
idea, la persigue y la cumple totalmente. La convierte en acción y en
resultado, como es el caso que aquí se refiere.
Eso es lo que hay que hacer. Eso es lo que nos
engrandece, esto es lo que al final nos hará presentes y respetables en el
mundo actual.
Su alegato es valiente, directo y oportuno. Como
cuando afirma, por ejemplo, y en el momento preciso, que no es cierto que haya
sobreabundancia de universidades.
¿Cómo lo ha de haber si hay una inmensa población
que se queda sin ingresar y sin poder estudiar? Y denunciar que esta
desinformación encubre intereses creados, de quienes no quieren tener rivales y
que se les arrebate el botín de la jornada.
Se siente aquí profundamente su convicción, su fe y
su fervor en algo. Conmueve ver que su empeño sea siempre altruista, como
enfático y confeso. Absolutamente abocado y convencido de su tarea en bien de
los demás.
12. NOS ENSEÑA A SERVIR
Se lo siente y comprueba como quien sostiene las
columnas del templo. Incluso como quien las va construyendo poco a poco, las va
subiendo hacia lo alto y alineando y sosteniéndolas para después legarlas a la
comunidad.
Esto no es fácil hacerlo, no es un esfuerzo
espontáneo, ni producto del entusiasmo y del momento. Es un empeño de largo
aliento. Y hasta un sacrificio. Hay que tener perseverancia, resistencia y
coraje.
Diez años duró la gestión para convertir la antigua
Escuela en Universidad Jaime Bausate y Meza.
Diez años desvelados, diez años en los que había
que estar vigilantes, atentos y activos. Con el recurso a la mano, con la cita
oportuna, donde no había que perder un solo detalle.
Puede decir el doctor Terrones: obra cumplida.
Misión concluida. Éste es el resultado.
Muchas personas situadas en todo rango y nivel son
las beneficiadas, aquellas graduadas y que estudiaron en esta casa, quienes
están estudiando ahora, y muchas más quienes estudiarán mañana.
El Dr. Terrones así nos enseña no solo a triunfar,
a concluir lo que se inicia y lo que se emprende, sino fundamentalmente nos
enseña a servir.
13. UN IMPULSOR
Con él hemos ganado una batalla: ser ahora
universidad, que en verdad es obra de toda su vida.
Él nació para darle categoría de Universidad a la
antigua Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza. Se consagró a ello y lo ha
conseguido. Y ésta es la obra que lo testimonia.
Se convenció de darle ese rango, ese lustre. Y ese
cometido. E hizo todo por obtenerlo, no únicamente como gestión, trámite y
papeleo.
Sino que organizó las cosas de tal modo al interior
de la institución que el nombre fue un fruto que ha caído por su propio peso,
por los estándares de calidad que se tenía logrados. Sino baste una
constatación: son 50 años de vida académica ininterrumpida, continua, década
tras década, año tras año, día tras día. Sin interrupción de una sola hora y
cada vez con mayor acierto.
¿No es esto un hecho para destacar?
El proyecto de ley que le confirió la categoría
universitaria a la Escuela Jaime Bausate y Meza fue presentado por el Dr.
Terrones en su calidad de diputado de la Nación, conjuntamente con Norman
Arellano Lozano, se convirtió en Ley 25167 el 5 de enero de 1990. Y se
convirtió en Ley 25167. Y después a él cabe el honor de haber sido el impulsor
de su institucionalización definitiva como universidad.
14. OBRA IMPRESCINDIBLE
Por eso, esta obra «Universidad Jaime
Bausate y Meza, testimonio de un periodista» es además un vademécum,
es una guía, es una agenda, es un diario de incidencias, una memoria
institucional.
Es libro de actas, cuaderno de bitácora y hoja de
ruta orientadora. En este caso, reivindica al periodista Eudoro Terrones
Negrete, como algo tan igual o más que el abogado que es, o el doctor en
educación, el filósofo, el editor o escritor consagrado que él es.
Es un documento invalorable en la historia de la
Universidad Jaime Bausate y Meza. Y, si lo es para una institución tutelar, lo
es para el país, para todos los peruanos, como nación. Es ejemplo para el mundo
acerca de cómo debemos ser en estos temas y en estos desafíos.
Es una obra imprescindible para conocer la índole,
la raigambre y el devenir de esta nuestra institución matriz.
Porque no sólo recoge el presente, sino que se
sumerge en el pasado y cubre referencias importantes que van desde los
principales hitos de la ahora Universidad hasta la vida de quien fue Jaime
Bausate y Meza. Y se sumerge en el promisorio porvenir.
15. LAS PUERTAS DE LA LUZ
Es la obra de quien se desvela, de quien se llena
de sabiduría, de quien acuña lemas, dibuja emblemas, redacta mensajes, dice
proclamas, escribe artículos periodísticos. La Universidad es su desvelo, su
joya, su altar o su diamante, hagámosle el honor de reconocerlo así y dejarlo
consignado.
Por considerarla un arma de combate, o por lo menos
una herramienta en nuestras manos, quisiera finalizar esta exposición con unos
versos del poeta León Felipe, ese hombre que nos enseñó tanto pese a no tener
casa, ni una tierra provinciana, ni una patria ni un abuelo que empuñara una
espada o hubiera ganado alguna vez una batalla, como sí lo tenemos todos
nosotros. Él decía:
Hombre, te amo no
porque bajaste de una estrella
sino porque nos distes herramientas, medios, llaves
para abrir las puertas de la luz.
Creo que eso es y hacen obras
como la que ahora nos entrega el Dr. Eudoro Terrones Negrete: crear conciencia,
abrir caminos, señalar hitos, perennizar derroteros, remitiéndonos para ello a
las fuentes más auténticas del ser.
Escribe:
Dr. José Manuel Casiano
Collazos
A
MANERA DE COMENTARIO DE LA OBRA “UNIVERSIDAD
JAIME BAUSATE Y MEZA, TESTIMONIO DE UN PERIODISTA”
La idea de este texto «UNIVERSIDAD
JAIME BAUSATE Y MEZA, testimonio de un periodista», estoy seguro que ha rondado
en la mente de Eudoro, desde hace mucho tiempo. Eudoro Terrones Negrete, sabe
que muchas preguntas vendrán en este Siglo XXI, por decir ¿Cómo se
gestó la Universidad Jaime Bausate y Meza? y ¿Quién fue Jaime Bausate y
Meza?.... Profesores, estudiantes, lectores interesados y acuciosos- que
sienten necesidad de ir más allá de una lectura histórica...conocer las raíces
que dan cimiento a su deontología....Por eso, para que la información no quede
dispersa tuvo la urgencia en este primer aniversario de la Universidad, noble
historia de 51 años de las raíces -entonces Instituto Libre de Periodismo, hoy
Escuela- del Alma Máter del periodismo peruano, de acopiar este material que
será valioso para las generaciones venideras, y tendrán en este texto la fuente
inspiradora para seguir afirmando su valía en la calidad educativa.
Esta obra que Eudoro Terrones
entrega, recopila sus artículos periodísticos y se convierte en historia escrita
por cientos de personas, hombres y mujeres que con sus aportes, cual granitos
de arena, forman la gran playa de experiencias que consolidan -como la
inmensidad del mar- la funcionabilidad de la Universidad Jaime Bausate y Meza.
Es la historia de gestiones
excitantes que sucedieron día a día, año tras año, aunque no se incluye
recordar los avatares que desde 1999 se inició para consolidar la categoría
universitaria conferida por ley Nº 25167 del 5 de enero de1990, gestión
titánica de Eudoro- y que muchas universidades mezquinamente y con
interpretaciones sesgadas negaban los derechos bien ganados que tenía la
Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza. Esas gestiones en el 2001
fracasaron en la Comisión de Educación y Cultura del Congreso de la República,
al no contar con el apoyo multipartidario.
Fue el 28 de Mayo del 2003, en
que se promulga la ley Nº 27981 que precisa las facultades de nuestra Escuela y
la validez de sus grados, títulos y estudios de maestría y doctorado, dentro
del marco de la ley Nº 23733. En la gestión de la Ley 27981, valga el
reconocimiento a la Dra. Mercedes Cabanillas Bustamante y a muchos que con
integridad e identidad cumplieron exitosamente su cometido.
Es pues que desde 2004 para
lograrse el justo cambio en la denominación de Universidad a esta escuela de
periodismo, templo del saber «comprometida con los grandes objetivos de
crecimiento, desarrollo y progreso del Perú» como Eudoro anota en su obra
«Hacia una nueva educación universitaria en el Perú», se integraron personas e
ideologías partidarias para superar las exigencias que este loable propósito
les demandaba.
Soy testigo de excepción-en
innumerables días y horas en la cafetería del Congreso de la República- del
temperamento y la aventura, la fe y el gozo de los avances que se iban
consolidando, así como de los conflictos y desesperanza que marcaban aquellos
de los que menos se esperaba -tenía tufillo a sabotear, destruir las gestiones
por intereses de terceros- pero se impuso el sentimiento personal y cálido de
congresistas como José Carrasco Távara, Hilda Guevara Gómez, Pedro Santos
Carpio, Rafael Vásquez Rodríguez ,Francisco Escudero Casquino y Yhonny Lescano
Anchieta, que desde el inicio del proyecto mostraron su propósito favorable
porque vieron un gran significado en Bausate y Meza y había una razón muy
fuerte para darle a esta Escuela de Periodismo el sitial, el lugar en el
sistema universitario.
«UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y
MEZA, TESTIMONIO DE UN PERIODISTA», incluye la historia de su mentor quien
consideró al género femenino con la participación de una dama cuyo seudónimo
era «reformadora limeña» que escribía artículos vinculados al mundo
femenino),sigue teniendo el entusiasmo de Eudoro y ese mismo lo ha impulsado a
escribir como una demostración práctica de las experiencias reales de problemas
y afirmaciones que se consolida el miércoles 12 de noviembre del 2008, día que
«marca el punto inicial de una segunda etapa en fructífera obra educativa que
no tiene punto final» de la entonces Escuela hoy Universidad Jaime Bausa te y
Meza, institución universitaria que en el día mencionado se constituye en la
primera que recibe a un excelentísimo señor Presidente de la República, Dr.
Alan García Pérez, para ahí promulgar su ley que la denominaría Universidad.
En esta obra, posiblemente
falten algunos breves hechos importantes, nombres ilustres o colaboraciones
invalorables, que se puede justificar por no tener continuidad, pero que su
solo gesto o participación tiene mucho valor.
Esta obra -que a pedido
de Eudoro-(aunque no merezco) me permito comentar brevemente, debe ser un
aliento y una ayuda como técnica para los que tienen retos similares; además es
un homenaje a quienes -sin intereses particulares- ayudaron a pensar,
impulsaron a vivir apasionadamente para lograr este cambio, que cambiaron pena
por gozo, debilidad por fuerza, fracaso por éxito, desesperanza por esperanza y
derrota por victoria.
Jaime Bausate y Meza,
Universidad: seguirá brillando con luz propia....seguirá edificando sus
fortalezas....y brindando la potencialidad a cada estudiante bausatino para que
sea eficiente.
«Universidad Jaime Bausate y
Meza, testimonio de un periodista», resulta muy importante porque refleja el
conjunto de riesgos y cualidades, de final exitoso y transformador....alguien
la tomará como base para seguirla enriqueciendo, que con seguridad ese es el
propósito de Eudoro Terrones Negrete, porque irá paralelo a la conducción lleno
de vitalidad y esperanza, con visión de permanecer siempre en el escenario, de
ofrecer una calidad de enseñanza, incentivar la investigación y promover la
extensión cultural.
Lima, 18 de noviembre
del 2009.
Dr.
José Casiano Collazos.
PREÁMBULO
Escribe:
Mario Rubén Gonzáles Ríos,
Sociólogo
y catedrático de la Universidad Jaime Bausate y Meza
Escribir unas notas
introductorias sobre la labor intelectual cotidiana de un compañero de trabajo,
de muchos años, es una tarea complicada, más si uno sabe que lo que lo
distingue es su apasionamiento, fidelidad y entusiasmo con cualquier
emprendimiento institucional educativo o periodístico. Compartir tareas con él
es como vivir los tres últimos minutos antes del Apocalipsis.
Dicho lo anterior y
enfocándome en la tarea de prologar el breve libro de consulta preparado por el
doctor Eudoro Terrones Negrete, recurriré a frases hechas o lugares comunes y
diré que es una tarea muy importante, si tenemos en cuenta que acopiar
documentos y testimonios harán posible, más adelante, la escritura de una
historia institucional de una universidad peruana en proceso de consolidación y
que el trabajo del Dr. Terrones, sin duda, pone en agenda.
Reunir documentos y
testimonios relacionados con una institución superior en Perú es una tarea
especializada si el objetivo es construir historias institucionales, por lo
tanto, se deben cumplir determinados principios, normas y condiciones que
faciliten el propósito y no lo desvirtúen, que es lo más frecuente entre los
que tienen urgencias de construirse una historia que no tienen o de los que se
afanan en revisarla. Los testimonios, los documentos, es decir los instrumentos
recopilados y el propio recopilador deben ceñirse a los cánones de la
heurística. Los documentos dan fe de hechos y derechos y los testimonios nos
muestran la subjetividad y la racionalidad con las que los hombres abordan sus
circunstancias, su tiempo y su espacio. Por estas razones, son tan valiosos en
la construcción de un conocimiento científico, particularmente para la
historia. Los documentos y los testimonios son como los mapas, son una visión y
una perspectiva y con ellas podemos dibujar uno desde el lugar en que nos
encontremos, sin satisfacer a todos los que conocen o conocerán esa geografía.
Por tratarse de un testimonio
y unos documentos referidos a una institución universitaria, este acopio
intelectual es valioso en la medida que registra acontecimientos,
protagonistas, relaciones y metas útiles para conocer el proceso de gestación y
evolución de una institución universitaria, cuya historia, sin embargo, es más
larga y desbordan el presente trabajo. Los testimonios y documentos registran,
muestran, hacen visible lo que la cotidianeidad oculta. Por eso es importante
el trabajo del doctor Terrones, porque exhibe con claridad los esfuerzos de
unos hombres que pugnan por plasmar una institución, en este caso, la
emergencia de la Universidad Jaime Bausate y Meza, que en el futuro- ojalá no
padezca de los males que aquejan a las universidades hoy. Al respecto, Enrique
Bernales Ballesteros, al analizar a las instituciones europeas –la universidad
lo es-, dice que éstas funcionaron bien en sus lugares de origen, pero que una
vez trasplantadas a América, lo hicieron mal y colapsaron. Efectivamente, las
instituciones del Estado, muchas de ellas, no resuelven los problemas, se
constituyen en un problema para las gentes y la sociedad, a pesar de los aportes
de la Universidad a la vida nacional.
Reunir materiales para una
historia en Perú, sobre todo si se trata de los relacionados a las
universidades, no es sencillo. Nos parece que en el escenario institucional
universitario, encontramos universidades que se sienten muy halagadas y
orgullosas de su pasado histórico, el que rememoran permanentemente, acaso solo
para olvidar que los documentos y testimonios del presente, del aquí y ahora,
no están a la altura del empinado pasado. Otras, más modernas, menos epopéyicas,
pero más eficientes y competitivas, tienen mucho que recopilar, pues la
historia que escriben debe ser digna de sus esfuerzos. Pero también existen, y
muchas, que no tienen pasado porque son muy recientes, pero que abortan su
historia al escribirla con publicidad y marketing, muy cerca del poder y lejos
del orteganismo universitario. Éstas, acaso quisieran acabar o por lo menos
ocultar todo documento y testimonio sobre sus ejecutorias, para decirlo en
términos judiciales.
Sí, los documentos y testimonios,
como los aportados por el autor de “Universidad Jaime Bausate y Meza,
testimonio de un periodista”, servirán para construir una historia fundada en
documentos que reflejan lo que se produce más allá de los episodios, sirven
para elaborar y escribir una auténtica historia, sin adjetivos; pero también
podrían servir para lo otro: para escribir una historia apologética y
manipulatoria. Nosotros lo sabemos como protagonistas, los papeles pueden
mucho, pero es imposible que ayuden a construir la honorabilidad y a
desarrollar los talentos en un claustro universitario, requisitos con los que
se construye un Alma Máter del Saber. Por eso es importante que nuestros actos,
relaciones y emprendimientos universitarios los veamos en perspectiva
histórica, porque una vez escrita, circularán hasta grabarse en la conciencia
humana.
Finalicemos señalando que los
documentos y testimonios que leeremos son valiosos para recrear un período
histórico que inicia, una historia de la Universidad, que siendo joven, exhibe
a la vez una experiencia de 50 años celebrando (y agonizando) su praxis
universitaria.
Lima, 16 de noviembre de 2009.
Mario
Rubén Gonzales Ríos.
Escribe:
Apolinario Mayta Inga (*)
Carta
Abierta
“UNIVERSIDAD JAIME
BAUSATE Y MEZA”
A toda
la familia de la UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA, va dirigida
estas breves palabras. Hemos escogido esta forma de escribir para no pecar de
ceremoniosos en la celebración por su conversión de Escuela a Universidad.
Aunque
por humildad no quisiéramos decirlo, pero como periodista, este acontecimiento
nos llena de enorme orgullo, alegría y satisfacción.
A pesar
de ser vieja esta costumbre de escribir una CARTA, mantiene su vigencia. Como
no habrá jamás fórmula distinta a la carta, para comunicarse a la distancia con
el calor del secreto. Y aunque no serán secretos los puntos que deseamos tratar
en estas líneas, intentaremos revestirlas del encanto de una desusada
confesión.
Con
sobrados méritos la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza, se
convirtió en Universidad, después de 50 años desde su creación como Instituto
Libre de Periodismo (1958), se aprobó la Ley Nº 25167 que le confiere a
esta institución educativa la categoría universitaria con todos los deberes y
derechos que gozan las universidades del país, aprobado en el primer gobierno
del Presidente Constitucional de la República, Alan
García Pérez, a iniciativa de los diputados de entonces: Eudoro Terrones
Negrete y Norman Arellano Lozano.
Y en el
mes de mayo del 2003 se aprueba la Ley Nº 27981 que precisa los
alcances de la Ley 251267, a iniciativa de la congresista,
Mercedes Cabanillas de Llanos de la Mata. Como sabemos la
Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza, desde 1990, viene funcionando
enmarcado en la Ley Universitaria, 25167 y 27981.
La
UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA, es un espacio para la reflexión, el
análisis y el diálogo. Es conciencia crítica permanentemente en busca de una
sociedad justa.
Todos
sabemos que si la Universidad no critica a la sociedad, si la
Universidad no critica al gobierno, si no analiza a fondo los grandes
problemas nacionales, si no plantea las alternativas de solución a los mismos,
simplemente la Universidad no es Universidad.
Esto es
lo que aprendemos de la experiencia griega la “Academia” y el “Liceo”, y es el
mensaje profundo de Sócrates, Platón, Aristóteles, Demóstenes, Tucídides y
Jenofonte, por citar a un reducido ejemplo de plétora de pensadores helénicos
que no sólo influyeron en su época, sino que crearon el meollo de la cultura
filosófica, científica y artística de la civilización contemporánea.
Como
señala Antonio Pinilla: Estos grandes filósofos, además de educadores, son
políticos en el sentido cabal de la palabra. Poseen la actitud crítica que
caracteriza la actitud universitaria. Son críticos sociales, críticos hondos y
responsables de la sociedad, la organización política y la cultura de la que
forman parte. A Sócrates le cuesta la vida ser crítico de la sociedad y del
gobierno de su tiempo.
La
sentencia de los jueces de Atenas decía que corrompía a la juventud porque
hacía y enseñaba cosas extrañas. En realidad lo que enseñaba era lo más
peligroso que se pueda hacer, desde el punto de vista de una sociedad tiránica
e injusta: enseñar a pensar, dar a la gente la capacidad de pensar y razonar
críticamente.
Esta
misión es el centro de su pensamiento crítico es el aporte de la cultura
helénica y, además, la actitud y aporte personal de los grandes filósofos y
fundadores de las primeras instituciones dedicadas a la investigación, al
pensamiento y a la enseñanza, modelos originarios de la universidad
contemporánea.
Hace 50º
años, fundaron la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza, sin
otra ayuda que el esfuerzo y la fe inquebrantable en un porvenir prometedor
para la Historia del Periodismo Peruano. En el logotipo se resume el
ideal de tan preclaros periodistas: No hay pasado que salvar sino un porvenir
que hacer.
Creemos,
que el cambio realizado por el Congreso de la República, será sin duda
alguna para bien. Como hace 50º años, renovamos nuestra fe en las nuevas
generaciones, convencidos de que el sacrificio de sus fundadores no fue en vano
y que nosotros, somos humildes seguidores.
Como hace
50º años la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza se rige por
una línea de conducta sin ondulaciones. Una posición sólida, invariable en sus
principios aurorales. Y es ahora la UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA
que asumirá con honestidad y responsabilidad social, jurídica y ética las
normas doctrinales como orientaciones válidas para un futuro exitoso;
privilegiando la veracidad de los hechos y aportando opiniones que sirvan para
consolidar la institucionalidad democrática y la peruanidad.
Y, este
nuevo faro de luz en la comunidad universitaria nacional permitirá orientar a
la opinión pública con mucha investigación científica, ajena a la retórica
demagógica, neutral con las posiciones político-partidarias y ejemplar en el
trabajo académico con sabiduría en el conocimiento.
Creemos
firmemente que en la UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA, siempre
encontraremos la continuidad de los grandes principios y valores éticos, de esa
visión pionera, democrática, peruanista y tercamente defensora de las
libertades que siempre ha caracterizado al periodismo peruano.
El tiempo
ha transcurrido veloz. Hoy ya podemos hablar de la
Universidad Jaime Bausate y Meza que después de cincuenta años de
justa aspiración logra el reconocimiento por el Congreso de la República,
de lo que siempre le correspondió: ser la Universidad de la juventud
y para la juventud que triunfa por sus propios méritos.
¿Cómo lo
hicieron? Con corazón y fe. Con un corazón y una fe que no tiene precio y que,
incuestionablemente, está por encima de todo el oro del mundo. Esa ha sido su
arma secreta.
Qué duda
cabe que esta conversión, les dará nuevas fuerzas para proseguir en esta
apasionante tarea de hacer ciencia y tecnología en aras del desarrollo del
país, de formar profesionales con una nueva rentabilidad y compromiso de cambio
social
Finalmente
agradezco a la familia de la UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA,
haberme dado la gran oportunidad de mi vida: Escribir esta CARTA ABIERTA
desde la Incontrastable, Huancayo, 22 de octubre del 2008.
(*) Apolinario Mayta Inga, profesor de Literatura y Castellano, periodista, escritor e
investigador de la literatura peruana, editor del Suplemento “Huellas” del diario
Primicia de Huancayo.